Lady Gaga vivió una velada muy emocionante el pasado 13 de marzo. Esa noche, la artista se encontró con dos grandes eventos en su agenda: la ceremonia de los Bafta y los Critics' Choice, citas ineludibles para ella, pues contaba con nominaciones en ambos premios. Pero había un pequeño problema, pues mientras que la gala de los primeros galardones tuvo lugar en Londres, los segundos se entregaron en Los Ángeles, California; un trayecto, en principio, imposible de realizar en un margen de tiempo tan ajustado, contando incluso con la diferencia horaria que hay entre las dos ciudades. Sin embargo, para sorpresa de todos, Lady Gaga apareció en los Bafta... y en los Critics' Choice. Incluso le dio tiempo a cambiar su vestido verde de Ralph Lauren con el que desfiló en los premios de cine británicos por un diseño negro y dorado de Gucci. ¿Cómo pudo hacerlo? ¿Acaso la artista tiene a su alcance un transporte con velocidades supersónicas? ¿Tal vez decidió proyectar un holograma? ¿O es que la intérprete de Bad Romance ha adquirido superpoderes de omnipresencia? En realidad, la explicación es mucho más sencilla. Dale al play y descubre cómo lo consiguió.