En los años noventa, la asociación Peta (People for the Ethical Treatment of Animals) decidió llamar la atención sobre el maltrato animal haciendo mucho ruido. A nuestra mente regresan las impactantes imágenes de aquella época, cuando los activistas de la organización asaltaban a famosas y fashionistas arrojando pintura roja sobre sus abrigos de visón, chinchilla o zorro. En plena calle, en las oficinas de moda y a la entrada de los desfiles, las ‘agredidas’ veían con horror cómo las llamaban ‘asesinas’, tras arruinar sus carísimas prendas.
Aquel linchamiento estético caló hondo y hoy en día la mayoría de los diseñadores y las grandes casas de moda apuestan en sus colecciones de otoño-invierno por la piel ecológica o faux fur . Es tendencia y, además, no hay nada como un buen abrigo de pelo para hacer frente a las bajas temperaturas. Ainhoa Armentia lo tiene claro.
Para combatir el gélido clima de Vitoria, la administrativa guarda en su armario —junto a su nutrido repertorio de plumíferos, parkas y acolchados en toda la gama de colores posibles— varias prendas de piel… auténtica y para más señas, de conejo.
La actual pareja de Iñaki Urdangarin suele reservar los anoraks para sus looks más casual y deportivos. Pero cuando tiene una cita especial —sin ir más lejos, la mañana de su paseíllo a la fama entre cámaras y micrófonos, tras la publicación de sus primeras fotos con el ex duque de Palma—, recurre a sus pieles, que complementa con un bolso de estética retro del que no se separa y sus pendientes de perlas.
Entre sus abrigos favoritos tiene varios: uno de color beige, compuesto por pelo de conejo y rematado en el bajo con pelo de raccoon (una especie de mapache), otro de piel de color marfil y un chaquetón, también de piel de gazapo, en tonos blancos y grises, con el que ha sido fotografiada en los últimos días.
A la vitoriana, que parece una mujer muy segura de sí misma, no le asustan los animalistas, a juzgar por la cantidad de veces que le hemos visto el mencionado tres cuartos de pelo conejil beige. Y eso que, tal vez consciente de que ahora mismo está en pleno foco de atención mediática, no suele repetir abrigo cuando sale a la calle.
Con estos artículos de su vestidor, Ainhoa entra de lleno en el hall of fame del que ya forman parte celebrities como Rosalía o Carmen Lomana, salvando las abismales distancias, claro. Las elecciones estilísticas de la cantante y la socialité en favor de las pieles de animales fueron muy cuestionadas en su momento en las redes sociales.
Las versiones del abrigo faux fur que exploran las primeras firmas de la moda son infinitas: de peluche, de pelo corto estilo teddy, de pelo largo efecto plumas, de borreguito... De hecho, no hay influencer o reina del estilo que no tenga uno o varios en su vestidor.