El intérprete Jussie Smollett, conocido por la serie Empire, ha sido condenado a 150 días de prisión por haber fingido un presunto ataque racista y homófobo en Chicago (EEUU) en enero de 2019. Además de pasar casi medio año en la cárcel, el actor permanecerá otros 30 meses bajo libertad condicional y deberá pagar 120.000 dólares de indemnización a la ciudad, más otros 25.000 de multa. El juez James Linn se mostró indignado con el protagonista de la ficción musical durante la lectura de la sentencia, declarando que no sabía "ni por dónde empezar" y definiéndole como una persona "egoísta, arrogante y narcisista", "un charlatán que pretendía ser víctima de un crimen de odio", cuenta The Daily Mail. "Querías hacerte más conocido haciéndote un montaje como si fuera una fiesta nacional y dar pena", dijo el magistrado muy enfadado porque el actor había "cometido hora tras hora de perjurio" al continuar diciendo que era inocente.
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Aunque el actor había permanecido tranquilo durante el juicio, Smollet demostró que la interpretación es lo suyo montando un tremendo alboroto antes de que los alguaciles se lo llevaran de la sala para su traslado a la prisión del condado: "Soy inocente y no soy suicida", dijo el intérprete, añadiendo que si le sucediera algo en la cárcel, él jamás sería el responsable: "Si me pasa algo allí dentro, yo no lo hice", gritó levantando el puño. "Si hice esto, significa que metí el puño en los miedos de los estadounidenses negros en este país durante más de 400 años y los miedos de la comunidad LGBT", añadió a voces.
El hermano mayor de Jussie, Jocqui Smollett, ha asegurado que está "muy decepcionado" con el veredicto, y su hermana Jazz ha calificado el caso como un error judicial. Pero no solo eso, los familiares del actor han escrito en sus perfiles sociales que van a seguir luchando porque creen en su inocencia y harán todo lo posible para que se sepa la verdad. El caso comenzó el pasado 29 de enero de 2019 cuando el actor llamó a la policía denunciando que había sufrido una agresión racista y homófoba por parte de dos hombres blancos con gorras de Make America Great Again, propias de los seguidores más ultras de Donald Trump. Según la versión del intérprete, entre varios insultos contra su color de piel y su orientación sexual, le habían puesto una cuerda en el cuello y le habían rociado los ojos con un líquido caustico.
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Las primeras acusaciones penales contra el protagonista de Empire por denuncia falsa fueron desestimadas en una polémica decisión de la Procuradora de Justicia de Michigan. En una segunda instancia, el fiscal especial Dan Webb revisó el caso y consiguió que un jurado aprobara el pasado febrero de 2020 seis cargos contra el actor, entre los que se incluían alteración del orden público y mentir a la autoridad sobre el supuesto crimen de odio. A pesar del testimonio de dos hermanos implicados en el proceso, en el que aseguraron que Smollet les había pedido atacarle y que incluso habían "ensayado" la agresión, el intérprete siempre ha insistido durante el juicio y las vistas en su inocencia.