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Son los nombres del día en lo que al deporte español se refiere, después conseguir algo que nadie había logrado hasta ahora para nuestro país. Adrián Díaz y Olivia Smart han conquistado el diploma olímpico en la modalidad de danza sobre hielo en los Juegos de Invierno 2022 de Pekín. La pareja de patinadores ve recompensado así su enorme esfuerzo y dedicación durante largo tiempo para llegar hasta aquí, y hace que hoy se hable más que nunca de un deporte minoritario como el suyo. Una práctica que no tiene tantos aficionados ni seguidores detrás, pero que sin duda hipnotiza por su belleza, armonía y plasticidad. Su octavo puesto en la final disputada en el Capital Indoor Stadium sabe a gloria, algo que ellos mismos disfrutan ya con alegría desbordada. "Muchísimas gracias a todos los que nos han ayudado para alcanzar este momento. ¡Es un auténtico sueño hecho realidad!", confesaba ella. Olivia tiene 24 años y es natural de Sheffield (Reino Unido), habiendo obtenido la nacionalidad española en 2017 para poder defender nuestros colores en las distintas competiciones internacionales.
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Eso sí, la patinadora británica ya conocía España puesto que siendo más joven solía veranear con su familia en Ibiza. Nacido en Barcelona en 1990, Adrián tiene siete años más que su compañera y esta es segunda presencia en una cita olímpica, mientras que para ella ha supuesto su debut. El catalán entrena en Montreal (Canadá) desde hace más de una década y allí se ha forjado con la élite del patinaje. Ambos, que cruzaron sus caminos a finales de 2015, venían de romper con sus anteriores parejas profesionales. Además de su indudable conexión sobre la pista, los dos son grandes amantes de los animales y adoran a sus respectivas mascotas, de cuya compañía suelen presumir en entrañables imágenes que comparten. Aunque derrochen pasión y complicidad en cada una de sus actuaciones, el catalán y la británica no son pareja sentimental. De hecho, ella tiene novio y en ocasiones se fotografía con él en actitud muy cariñosa, demostrándole así el amor que siente por él. En lo deportivo, había confianza en que Adrián y Olivia obtuvieran el diploma tras una exitosa temporada en la que pulverizaron tres récords de España, fueron cuartos en el último campeonato de Europa y medallistas en una prueba del prestigioso circuito del Grand Prix.
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Este lunes lo ha dado todo al ritmo de la banda sonora de La máscara del Zorro, el célebre filme protagonizado por Antonio Banderas y Catherine Zeta-Jones, mientras que el oro ha sido para los franceses Gabriella Papadakis y Guillaume Cizeron. En la rueda de prensa posterior, el patinador español ha confesado que le iba costar "un par de días" asimilar lo logrado, y daba algunas claves del significado que tiene su hito: "Con entrenamiento diario, constancia, energía positiva y buena actitud se puede llegar a lo que te propones. Es superar un objetivo, alcanzar una barrera que hace cuatro años que queríamos batir y por fin ha llegado el momento. Es un mensaje para todos los españoles que quieran dedicarse al patinaje, que no crean que es imposible y que se puede conseguir con duro trabajo", ha recalcado. Ahora, ambos tienen como reto preparar el Mundial de Montpellier en Francia que se celebra entre el 21 y el 28 de marzo, para después tomarse un más que merecido descanso.
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