Las claves del reparto de la herencia de Carlos Falcó
Casi dos años después de la muerte del marqués de Griñón, sus hijos y su viuda han llegado a un pacto para distribuir su patrimonio
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En diciembre de 2020, Esther Doña cerró el año más duro de su vida tras despedir a su marido, Carlos Falcó, y a su padre, José Doña, ambos fallecidos por coronavirus. Entonces, durante un reportaje en el que desnudaba sus sentimientos por primera vez tras la tragedia, la marquesa viuda de Griñón confesó a ¡HOLA! que, a pesar de que no tenía relación con los hijos de su esposo, no existía ningún conflicto por el reparto de la herencia. “Estamos trabajando para llegar a un acuerdo en el que todos estemos satisfechos”.
Casi dos años después de la desaparición del aristócrata, su legado ha sido finalmente distribuido entre sus herederos. El pacto entre todos ellos se ha llevado con sumo sigilo. Carlos Falcó designó como albacea a un buen amigo al que estuvo vinculado familiarmente en el pasado. Este hombre, curtido en el mundo de las finanzas y las inversiones, ha sido el encargado de hacer cumplir sus voluntades. Tras calcular el valor total de los bienes que formaban parte del caudal hereditario, los hijos del aristócrata acordaron pagar a Esther un porcentaje del tercio de mejora que le correspondía en concepto de usufructo vitalicio. La malagueña ha recibido la llamada cuota viudal usufructuaria en contraprestación por renunciar a disfrutar de todas las propiedades de su marido a pesar de no ser su dueña, un derecho previsto en el Código Civil y que el propio Carlos dejó escrito, según contó ella misma. “Estoy contenta con la decisión de mi marido. Me dejó como usufructuaria de todo”, dijo a esta revista en 2020.
Cómo ha sido el proceso
“Con Esther se ha llegado a un acuerdo y todos, contentos. Se ha portado fenomenal”, ha manifestado hace unos días Tamara Falcó al periódico El Mundo. Por su parte, Xandra Falcó, durante un acto del Círculo Fortuny que preside, ha querido alabar la buena disposición de la marquesa viuda, quien, al casarse en 2017 con Carlos Falcó, firmó un acuerdo prematrimonial en el que quedaba claro que su relación estaba “basada en el amor y no en temas materiales”.
Los hermanos Falcó han comprado a Esther Doña, viuda y cuarta mujer del marqués, el usufructo de un tercio de todas las propiedades de su padre
“Creo que Esther se ha portado divinamente. Ha sido una transición y una testamentaria ejemplar, donde los cinco hermanos lo hemos hecho muy bien y hemos llegado a un acuerdo con ella”, ha comentado Xandra. Pero ¿cuál era el patrimonio exacto a repartir del marqués a su muerte a los ochenta y tres años en marzo de 2020? La joya de sus inmuebles la constituía el palacio de El Rincón, una fortaleza ajardinada del siglo XIX en Aldea del Fresno (Madrid), que heredó de su tía Paloma Falcó y que cuenta con 30 habitaciones y más de 120 hectáreas de terreno. En 2012, este espectacular edificio fue tasado en cinco millones de euros.
Tal y como ha contado El Mundo, el asunto del palacio se ha finiquitado de la siguiente manera: su hijo mayor, el banquero Manolo Falcó, hoy marqués de Castel-Moncayo, y Tamara Falcó, marquesa de Griñón, han comprado a sus tres hermanos, Xandra, Duarte y Aldara, su correspondiente parte del inmueble, así como el usufructo a Esther. Según ha podido con firmar ¡HOLA!, Manolo y Tamara lo han hecho de este modo con el objetivo de convertirse en socios de un nuevo proyecto empresarial.
“Esther se ha portado divinamente. Ha sido una transición ejemplar, donde los cinco hermanos lo hemos hecho muy bien y hemos llegado a un acuerdo”, declara Xandra
“Hay varias ideas interesantes en marcha para su explotación, pero aún estamos en las primeras fases”, nos confirma un miembro de la familia que prefiere guardar el anonimato. Tras el interés de varios posibles compradores mostrado hace un tiempo, sus nuevos propietarios tampoco descartan desprenderse de él llegado el momento. “Si aparece un comprador, encantados de vender”, ha dicho Tamara. Si quieren conocer de cerca este palacio, lo podrán hacer en el nuevo documental que la hija de Isabel Preysler prepara para Netflix, Tamara Falcó: la marquesa, cuya imagen promocional ha sido tomada en El Rincón.
Mirabel, para Xandra
No acaba ahí el patrimonio inmobiliario de Carlos Falcó. A su vez, poseía el 33 % del palacio de Mirabel, en Plasencia (Extremadura), junto con su hermano Fernando, marqués de Cubas, también fallecido en 2020. Un edificio de 6000 metros cuadrados catalogado como uno de los monumentos más destacados de la ciudad que pertenece a la familia y acogerá la celebración del enlace de Álvaro Falcó e Isabelle Junot el próximo 2 de abril. El marqués estipuló que ostentara este porcentaje su hija Xandra, marquesa de Mirabel desde 2001, quien se convierte en una de las nuevas propietarias de este fascinante lugar con más de quinientos años de historia.
Tamara y su hermano mayor, Manolo, marqués de Castel-Moncayo, se han quedado con el palacio El Rincón y ya piensan en su explotación empresarial con varias propuestas
El marqués también tenía la finca “Quinto Casa de Vacas”, situada en la localidad toledana de Malpica de Tajo, donde descansan sus cenizas y donde cumplió su sueño de elaborar los famosos vinos y aceites Marqués de Griñón. Sin embargo, esta propiedad no formaba parte del caudal hereditario, sino de un fideicomiso. El abuelo del aristócrata, Felipe Falcó, se lo legó al fallecer para ayudarlo a convertirse en bodeguero, pero dispuso que estos predios familiares pasaran en herencia al hijo mayor de Carlos, Manolo, su actual propietario.
También se ha comentado que el aristócrata poseía una finca en Navalmoral de la Mata (Cáceres) llamada “La Barquilla”, aunque la realidad, según confirman fuentes familiares, es que fue vendida hace años.De este modo, los herederos del marqués han cerrado el capítulo de su herencia. En este tiempo han cambiado mucho las cosas. Esther vive con ilusión su noviazgo con Santiago Pedraz, magistrado de la Audiencia Nacional.
Xandra Falcó es la nueva propietaria de una parte del palacio familiar de Mirabel, ubicado en Plasencia
Por su parte, sus hijos también siguen adelante con su vida. Manolo Falcó, casado con Amparo Corsini, compagina su trabajo como banquero en la City de Londres con la gestión de los vinos Marqués de Griñón. Xandra, viuda de Jaime Carvajal, preside Círculo Fortuny, una asociación que promueve el lujo, y sigue vinculada al negocio vinícola. Tamara, ilusionada con Íñigo Onieva, continúa preparándose para ser chef y está rodando su segundo reality. Duarte es pintor y activista provida. Por último, Aldara, la más desconocida, ha regresado a Madrid tras estudiar Filosofía y Matemáticas en Viena.
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