La cantante Merche cumple veinte años en la música y lo celebra con el lanzamiento de su décimo trabajo de estudio. Entre las once nuevas canciones reunidas en 20 conmigo, que es como se llama el disco, se encuentra Este lunes. Se trata de un homenaje muy especial a Álex Casademunt, que falleció en marzo de 2021, en un accidente de tráfico. Y es que, a pesar de que su historia de amor duró cuatro años, ambos siempre mantuvieron su relación de amistad.
No es el único bache que se ha encontrado en el camino, porque la cantante también sufrió la pérdida de su padre en junio de 2019 y puso fin a sus siete años de amor con Arturo Requejo, ex concursante de Gran Hermano , días antes del confinamiento. Pese a todas estas adversidades, Merche se muestra alegre y optimista ante ¡HOLA!, como hace cuando habla de su hija Ambika, la pequeña que nació en La India hace once años y que legalmente adoptó en 2014, como madre soltera.
—Felicidades por estos veinte años.
—¡Veinte años! Se dicen pronto, pero una echa la vista atrás y piensa: “Madre mía”. Es que han pasado muy deprisa. Es un tópico y todo el mundo lo dice, pero, en mi caso, es cien por cien verídico. Veinte años… ¡Madre mía, quién me lo iba a decir!
—Como se suele decir en los cumpleaños, lo importante no es el número de años, sino el poder seguir. En tu caso, en la música.
—Claro, evidentemente. Eso es un regalo y me lo tomo así. Lo que resumiría estos veinte años sería el agradecimiento a toda esta gente que me ha dado la mano y ha seguido mi música desde el principio. Veinte años se dicen pronto, pero son veinte años.
—Y el regalo a estos fans es un nuevo disco, 20 conmigo.
—Sí, un disco formado por diez canciones inéditas. En el mismo disco, va a haber una especie de regalo en el que los protagonistas serán las canciones, pero no quiero desvelar tanto.
—La composición del disco se ha dado en circunstancias muy especiales, en plena pandemia. ¿Cómo ha sido el sacar adelante el proyecto?
—El proceso de composición ha sido muy fácil. Cuando te ocurren cosas, es muy fácil escribir, porque tienes más cosas que contar. Han sido un par de años, con pasajes turbulentos, en los que han pasado muchas historias. O bien a mí o a gente de mi entorno. Por ejemplo, una de las canciones del disco es Somos unos valientes, que ya salió el adelanto hace unas semanas y habla de cómo hemos sobrellevado este tiempo, con esas vicisitudes y una situación que nadie se imaginaba que viviríamos. Los acontecimientos que van ocurriendo es inspiración para mí… La vida es mi inspiración.
“‘Este lunes’ es una canción con la que me he abierto en canal. Para mí, escribir y hacer canciones es una forma de desahogarme”
—¿Qué distingue este nuevo trabajo de los anteriores?
—Musicalmente, es muchísimo más rockero. Está producido por Luca Germini –productor de Melendi y Sergio Dalma, entre otros–, que es una bestia, un crack. He hecho el disco más rockero de mi vida, en cuanto a sonido y arreglos, pero es un resumen de mi esencia como compositora. Hay de todo un poco: baladas desgarradoras y temas más divertidos para bailar. Acabamos de lanzar la canción Mis amigos, que está dedicada a mis amigos de toda la vida, que están ahí en lo bueno y, sobre todo, lo malo. Como iba diciendo, es un disco muy pintoresco y muy variado, que queda definida la Merche compositora y la Merche cantante después de veinte años.
—Una de las canciones de 20 conmigo que más llaman la atención es Este lunes. ¿Cómo la definirías tú?
—Es una canción con la que me he abierto en canal. Para mí, escribir y hacer canciones es una forma de desahogarme. Ya me pasó con mi padre –fallecido en 2019– y con Eras tú y Pablo –dedicada al padre de uno de sus novios–. Es una manera de echar fuera todo ese dolor que produce la pérdida de alguien a quien quieres mucho. En este caso, de Alex. Es un desgarro, pero también tiene una parte muy positiva y muy alegre. Es una mezcla de dolor y alegría. En el día a día, él está conmigo y ese es el leit motiv de la canción. Te tuve a mi vera, parece que no estás, pero, en realidad, sí estás porque te llevo en mi alma. Ese sería el resumen de Este lunes.
—¿Te ha costado mucho componerla?
—No. Tenía muy claros los arreglos, cómo tenía que sonar, lo que quería contar y cómo lo quería contar. Al tener un propósito tan claro, al final te sale sola. Es como las mujeres cuando tienen a sus bebés. Algunas dicen que sale solo y otras, a veces, tienen partos muy dolorosos. Más o menos, lo mismo pasa haciendo canciones. Algunas se atascan y no paras de darles vueltas, como me ocurrió con Si te marchas. Sin embargo, con Este lunes, Eras tú u otras tantas, tenía tan claro lo que quería transmitir, que salieron muy rápidas.
—¿La familia de Álex Casademunt ha escuchado Este lunes?
—Tan pronto la hice y empezó a sonar en maqueta, ni siquiera estando producida, se la pasé su familia: su madre, su hermano, su hermana… Para que la escucharan y sintieran ese cariño que yo le quería transmitir a él. Fueron los primeros en escucharla, antes que la discográfica y los managers… Y les encantó. Tenemos mucho contacto. Siempre lo hemos tenido en estos veinte años, pero la pérdida de Álex quizá nos ha unido más. Sobre todo, con su madre, Rosa, que es maravillosa.
“Álex era una persona de las que entran en una habitación y la iluminan”
—Es un homenaje muy bonito.
—No tenía claro que la canción fuese a formar parte del disco, pero fueron ellos los que me animaron. Y Álex, porque a él le encantaría, eso te lo garantizo. En definitiva, creo que es bonito que sigamos hablando de él y no nos olvidemos de él tan rápido, porque era un artista que todo lo que quería muchísimo.
—Todo el mundo guarda muy buen recuerdo de Álex.
—Era una persona muy llena de vida, con los ojos más bonitos del mundo. Era una persona de las que entran en una habitación y la iluminan, de las que quieres tener a tu vera para alegrarte el día. Era una persona maravillosa, llena de vida, a la que todos echamos de menos… Todo el que lo conoció lo quiere y sabe perfectamente que él iba a estar encantado con la canción. Por eso, decidí que estuviera en el disco.
—Pese a que tu relación con Álex no funcionó, siguió a tu lado como amigo.
—Sí, sí.
—Decías que este disco ha sido fácil de componer, porque te han pasado muchas cosas. Y la verdad es que estos dos años últimos han sido muy, muy duros para ti.
—Intensos y duros, como lo han sido para muchísima gente. He pasado la pandemia como todo el mundo, a trancas y barrancas, pero no considero que hayan sido los dos peores de mi vida.
—En estos últimos años, has perdido a tu padre y has pasado por cambios en tu vida sentimental. No sé si eras consciente de lo fuerte que eres.
—Es que me conozco un poquito… (ríe). Ya sé dónde flaqueo (ríe). Me caigo, pero me levanto rápidamente. Me gusta eso de tener la capacidad de llorar y desahogarme, pero tampoco me gusta estar mucho tiempo lamiéndome las heridas. Eso del abandono o del renuncio no está en mi forma de ser. Por muy difíciles que se pongan las cosas, no son tan difíciles como para llevarme a ese punto. Prefiero salir adelante con más fuerza.
—¿Tiene que ver ese punto rockero del disco con la fuerza para salir adelante?
—No, me apetecía ese tipo de sonido. O igual sí (ríe). Si es sí, es involuntariamente. Ha sido una etapa complicada, como para todos. La pérdida de mi padre… Imagínate. ¡Qué duro! Pero, en definitiva, la vida es eso: noticias buenas y momentos buenos, que tenemos que disfrutar al máximo. Luego, están los tropiezos, que tenemos que solventar y gestionar de la mejor manera posible. Depende de cómo se lo tome tu cabeza, sufrirás más o menos. Puedo sufrir e, incluso, llorar, pero, al día siguiente, hay que estar como una rosa. El objetivo en la vida es ser feliz y, si te anclas en las cosas feas que ocurren en el camino, no lo serás.
—Aparte de lo que ya hemos hablado, ¿la pandemia te ha golpeado de alguna forma especial?
—Laboralmente, sí. Tenía una gira de teatros preparada, con el disco que acababa de salir, y sólo pude dar un concierto. En lo personal, toda la familia ha tenido COVID, pero, gracias a Dios, hemos estado asintomáticos o lo hemos pasado como una gripe convencional. Somos muy afortunados.
—De momento, el próximo 15 de febrero regresas a los escenarios con un concierto en Madrid. Supongo que tendrás ganas y más para celebrar estos veinte años en la música.
—Por supuesto, que soy un animal del escenario y llevo más de mil cuatro cientos conciertos. Imagínate si lo echo de menos. En Madrid, haremos la presentación del disco y no será un concierto convencional, porque haremos photocall y presentación a medios. Será un poco diferente, pero luego estaremos en Barcelona, Valencia… Empezamos, pero no sabemos cuándo acabamos. Igual estamos cinco años dando vueltas (ríe).
“La vida es eso: noticias buenas y momentos buenos, que tenemos que disfrutar al máximo. Luego, están los tropiezos, que tenemos que solventar y gestionar de la mejor manera posible”
—Eso significará que funciona el espectáculo.
—Ojalá, porque tendremos trabajo y las personas del equipo técnico han pasado unos años muy malos. Esta gira será para pasárselo muy bien. Encima, las canciones del disco son rockeras… Imagínate. Además, vamos a pasar dos horas recordando… Hay quien me dice en las redes que ha crecido con mi música y que se casó con alguna canción… Me imagino que mucho público vendrá para escuchar esas canciones y le venga a esa época. Por eso, haremos una mezcla del pasado y del presente.
—Un amigo siempre dice que todos los estados de ánimo se pueden describir con tus canciones.
—(Ríe). Es verdad. (Ríe). ¡Me lo han dicho! Si es que, en el fondo, es la vida misma.
—Abre tu mente, No me pidas más amor, No me das miedo, Cal y arena…
—Sí, sí. ¿A quién no le han dejado? ¿Quién no ha dejado? ¿Quién no se ha portado mal alguna vez? ¿Quién no ha descubierto a su pareja portándose mal? En el disco, también hay mucha tela que cortar. Son situaciones cotidianas, que nos pasan a todos en algún momento de nuestra vida. Afortunadamente, la vida te da la oportunidad de vivir muchísimos momentos y ese es el motivo por el que se siente identificado con las letras y canciones.
—Como decíamos antes, se cumplen veinte años de tu carrera musical. ¿Qué balance haces?
—Desde pequeña, soñaba despierta y siempre quería dedicarme a esto, ganarme la vida cantando y contando mis historias. Pero nunca pensé dónde estaría veinte años después. Ahora, preparando la gira y hablando en las entrevistas, empiezo a ser consciente de que llevo veinte años. Me siento superafortunada y agradecida. Gracias al público, que es quien se ha empeñado en que siga escribiendo y contando mis historias.
—¿Qué consejo le darías a la Merche de hace veinte años?
—Deja una parcela del trabajo para controlar otros asuntos. Este negocio no es sólo componer, hacer canciones, cantar y subir al escenario. Hay más detrás.
—¿Mirar la letra pequeña de todo?
—Sí, sí.
—Además de componer 20 Conmigo, ¿has aprovechado la pandemia para hacer alguna otra cosa que no pudieras hacer antes por el frenesí del día a día?
—No me da la vida. He tenido la suerte de hacer la música de un corto que habla de la violencia y el acoso sexual infantil. Tiene muy buena pinta y se va a estrenar próximamente. Estoy encantada, la verdad. Vengo de hacer las canciones, la promoción y empezó ahora la gira… Luego, ser mamá. Desde que tengo a mi niña, priorizo ciertas cosas y le dedico tiempo a ella, para no perderme tiempo de su infancia.
—Ya tiene once años. ¿Cómo reacciona cuando ve a su madre en concierto? ¿Te reconoce?
—Está muy acostumbrada. Lo vive con naturalidad, porque ha crecido viéndome en los escenarios. Es verdad que, al principio, se me agarraba a la pierna cuando me pedían fotos por la calle, como diciendo: “No me la quitéis, que es mía” (ríe). Pero es la primera que disfruta con los conciertos y de las canciones. Ya se ha metido en el estudio conmigo, que grabó los coros en una canción del anterior disco y que se llama Puentes.
—¿Repetiréis la experiencia?
—De momento, no me lo ha dicho… Espero que no (ríe). Yo preferiría que no cantara, aunque yo la apoyaría en todo lo que ella quisiera. Ahora dice que quiere ser abogada… Me encanta.
—Antes de estallar la pandemia, rompiste una relación. ¿Sigues soltera?
—Estoy encantada de la vida, feliz.
—¿Tienes pareja o no te apetece?
—Estoy feliz, encantada, completa y con muchas ganas de afrontar esta nueva aventura, tanto del disco como de la gira. No puedo decir mucho más.