En las últimas semanas, muchas han sido las influencers que han decidido pasar por el quirófano o se han sometido a pequeños retoques estéticos con el fin de verse y sentirse mejor con ellas mismas. Desde María Pombo hasta Anna Ferrer Padilla o Rocío Osorno lo han compartido con sus seguidores sin tabúes, explicando y aclarando dudas demostrando así, una vez más, que les gusta ser muy sinceras con los miles y miles de seguidores que están pendientes día a día de sus vidas. Han querido someterse a las intervenciones en esta época del año, ya que enero es un buen mes para hacerlo porque les da tiempo a recuperarse de cara a la primavera y el verano, donde la exposición al sol es mayor.
Las primeras en pasar por el quirófano han sido Rocío Osorno y Teresa Bass, que han querido hacerse a la vez una rinoplastia. No estaban contentas con la forma de su nariz y han dado el paso juntas. “Estéticamente no se va a notar mucho, la única modificación exterior es que el tabique ahora está recto del todo, aunque por fuera apenas se notaba, y que me han cerrado un poquito los alares”, respondía Rocío Osorno a la pregunta de sus seguidores a la salida del quirófano. El que fuera con su amiga Teresa Bass a operarse, se debe a que juntas fueron a la consulta y al final quisieron hacerlo el mismo día. “Las dos tan motivadas que cogimos cita cada una para nuestra operación el mismo día para así hacernos compañía”, decía Rocío.
También se ha hecho una rinoplastia Anna Ferrer Padilla. Era una cosa que siempre tenía en mente, pero reconoce que le daba algo de miedo. “Es verdad que no tenía una nariz que llamara la atención pero a mí, estéticamente, no me gustaba. No quiero que se me malinterprete, para mí no era ningún complejo”, confesaba. Después de mucho pensarlo, daba el paso con un médico de su confianza afincado en Sevilla para “poner recto el tabique y el final de la punta, pero siempre con un resultado natural”.
Hasta la capital hispalense se desplazó con su madre, Paz Padilla, quien ha estado a su lado en el proceso y ahora, después de ver hace tan solo unos días el resultado, Anna asegura que está muy contenta. “Me encanta porque es sutil y natural y no me ha cambiado la expresión”, decía nada más mostrar que ya le había quitado la férula.
María Pombo también ha pasado por el quirófano, pero en su caso para hacerse una reducción de pecho. Ella siempre había dicho en sus redes que era algo que quería hacer en el futuro, sobre todo por las molestias que sentía en la espalda y el cuello. “Tener mucho pecho a veces es muy bonito y a mí, de hecho, me encanta. Llevo teniendo pecho desde los trece años y es una cualidad mía que me gusta, lo que pasa es que ha llegado a un punto en que se ha sobrepasado. Después del embarazo de Martín, además de que me creciera, se me vació por arriba y como os podéis imaginar, ahí hay menos músculo y más piel, con lo cual es mucho más difícil de ‘controlar’, más peso el que tiene que soportar mi cuello y más dolor de cabeza”, contaba al regresar a su casa tras la operación.
También compartía unas imágenes de sus vendajes y explicaba que se le veía el pecho mucho más hinchado, pero que era debido a la inflamación, algo habitual después de una intervención quirúrgica. Pero dentro de poco podrá ver ya cómo es el resultado final. “De aquí a tres semanas veré la luz al final del túnel y de aquí a seis meses ya veré el resultado definitivo, así que todavía queda esperar”, decía María. En cuanto a cómo se sentía, contaba que tenía como unas “agujetas muy fuertes” y que lo que estaba llevando peor era no poder coger a Martín en brazos, ya que el médico le ha dicho que no puede levantar durante las primera semanas.
A esta misma operación de pecho se sometió en 2013 su amiga Aída Domenech, conocida en redes como Dulceida, quien en más de una ocasión ha reconocido estar muy contenta por haber dado el paso de hacérselo.
Retoques estéticos
Ellas no han pasado por el quirófano, pero sí que han decidido hacerse sutiles cambios en su rostro, con el fin de prevenir las arrugas del inevitable paso del tiempo. Teresa Andrés Gonzalvo contaba hace unas semanas y compartía las imágenes de cómo se había puesto un poco de botox para tener la piel más tersa y luminosa de cara a su boda, que el próximo 8 de julio. Se lo ha hecho en la clínica que tiene en Alicante, llamada Enea, donde también se hará mas tratamientos estéticos para su gran día.
Con la misma doctora también se ha puesto botox Marta Pombo, quien acaba de cumplir treinta años y decía que al pasar a esa edad, quería empezar a retrasar la aparición de arrugas. “Prevención de riesgos al llegar a los 30. Era algo que me daba mucho miedo por dos cosas. Primero por contarlo y hacerlo público porque pasaba olímpicamente de una polémica, en plan: ‘cómo has podido ponerte bótox, has perdido naturalidad’. Pero me dije: ‘Mira, tienes treinta años, chata, eres mayorcita, haces lo que quieres con tu cuerpo y me apetecía contároslo’”, explicaba con total sinceridad a sus seguidores.