Diego Verdaguer, uno de los grandes nombres de la balada romántica latinoamericana, ha fallecido a los 70 años, según informó la familia a través de un comunicado. "Con absoluta tristeza lamentamos informar a su público y amigos que nuestro querido Diego el día de hoy dejó su hermoso cuerpo para continuar su camino y creatividad en otra forma de vida eterna... Toda la familia estamos sumergidos en este dolor por lo que apreciamos su comprensión en estos momentos tan difíciles", son las emotivas palabras que han compartido sus hijas Gimena y Ana Victoria.
La discográfica con la que trabajaba Diam Music ha informado de que el artista argentino-mexicano murió en Los Ángeles (California), donde será incinerado, tras complicaciones por el covid, virús que contrajo el pasado mes de diciembre cuando tuvo que ser hospitalizado. Su hija mayor, Gimena Boccadoro, rota de dolor, le ha dedicado una sentida despedida: “Siempre te volveré a encontrar. Siempre mantendremos nuestro amor. Pese a todo, nunca nos soltamos la mano. Tu eres mi apoyo, y como tú dijiste, yo soy tu ángel. Un ser como tú siempre encontrará felicidad, crearás belleza y vivirás aventuras. Sigue pa’, sigue creando. Gracias por ser mi papá, como dice la canción Nena, eres mi primer gran amor. Gracias por ser el mejor abuelo para Malena y Elan los cuales te aman profundamente. Eres y siempre serás mi sol”.
Diego Verdaguer nació en Buenos Aires en 1951 bajo el nombre de Miguel Atilio Boccadoro y adoptó el nombre con el que se haría popular cuando tenía 17 años y era una promesa de la música. Pronto comenzó a despuntar en su país, pero fue en México, su segunda casa, donde realmente alcanzó la fama internacional, hasta hacerse con 20 discos de oro. Pero si hubo un tema por el que siempre será recordado es su exitoso Volveré, uno de sus sencillos más vendidos y que posteriormente versionó con su segunda esposa Amanda de Miguel.
En el plano personal, el cantante tuvo a su primera hija a los 19 años, Gimena, una paternidad temprana de la que habló en numerosas entrevistas. “Sí, siempre fui un padre presente. Yo le pedí a la madre que yo quería tener a la nena, porque ella estaba sola, sus papás habían muerto, entonces, la nena se fue a vivir conmigo y con mis padres y ella la visitaba”, contó en 2012 en el programa mexicano El minuto que cambió mi destino. Posteriormente se fue a vivir con su madre, pero a los 12 años regresó con Diego que ya residía en el país azteca con su segunda esposa Amanda de Miguel, con quien tuvo a Ana Victoria.