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El coronavirus sigue avanzando y la sexta ola cada vez arroja cifras más preocupantes. Están siendo unas fechas en las que han sido muchos los que han tenido que confinarse y no han podido pasar unos días tan señalados junto a los suyos para celebrar estas entrañables fiestas. Son muchos los rostros populares que tratan de concienciarnos de la importancia de cuidarnos para proteger a los demás, a nosotros mismos y evitar que el virus se siga propagando, entre ellos, Carme Chaparro, quien está viviendo la pandemia muy de cerca. La periodista está pasando por un momento complicado ya que su padre se encuentra en estos momentos ingresado en un hospital tras haber contraído coronavirus. La escritora fue a visitarlo al centro hospitalario donde se encuentra recuperándose y quiso hacer un llamamiento a todos sus seguidores para que tomen todas las precauciones necesarias porque la pandemia no ha acabado "Cuidaos mucho, por favor. Este virus sigue siendo un cabrón", afirmaba con rotundidad.
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Para no preocupar a sus fans, la autora de Calladita estás más guapa ha querido dejar claro que no era ella la infectada. "Aclaro: no, no soy yo la contagiada, acabo de salir de la zona COVID de un centro médico, de ver a mi padre. Qué duro", ha escrito junto a una imagen en la que podemos verla ataviada con un traje EPI, un atuendo que ya se ha convertido en algo habitual a su salida de la zona covid del hospital. No ha desvelado más detalles sobre el estado de salud de su padre, tal y como ha contado a la revista Semana "Tuvo una recaída, pero ayer ya le mejoró la saturación de oxígeno en sangre. Han sido días complicados, aunque parece que ya vemos un poco la luz", ha contado aliviada.
La presentadora de Los teloneros ya ha hablado en otras ocasiones sobre la importancia de vacunarse en su columna en Yahoo Noticias. Ahí ha desvelado que por las patologías previas de su progenitor, en caso de que se contagiara de coronavirus les habían avisado los médicos que "va a tener un cuadro muy, muy complicado", ha explicado. Ha hablado además sobre el delicado estado de salud de su padre, quien se encuentra ingresado en el hospital desde el pasado septiembre ya que "sus pulmones funcionan mal, y desde hace unos meses que no puede vivir sin estar conectado 16 horas al día a un suministro constante de oxígeno", ha revelado. Y continuaba explicando que, aunque ha seguido todos los protocolos impuestos por las autoridades sanitarias, todos estamos expuestos al virus. "Los últimos dos años los ha pasado casi en soledad, en un pequeño pueblo, viendo a gente en exteriores y con mascarilla siempre. Toda precaución era poca". Pero hace unos días recibieron la llamada de su doctora para darles la noticia de que su padre se había contagiado de coronavirus. "Temimos lo peor. Imaginad", ha seguido relatando.
El padre de Carme Chaparro está ingresado en una residencia de cuidados especiales, allí "un equipo de médicos y personal sanitario trata de que pueda volver a ser autónomo". Fue en ese centro donde se contagió. Por suerte, su progenitor se encuentra ya fuera de peligro. "Hoy sabemos que se va a salvar. El virus no ha logrado atacar sus maltrechos pulmones, gracias, sobre todo, a las vacunas, nos cuentan los médicos. Y así, tras varios días con síntomas algo complicados, por fin sabemos que va a vivir", ha explicado mucho más tranquila.
La escritora de La química del odio ha querido compartir también como fue otro encuentro con su padre unos días antes, en lo que ha calificado como "los mejores minutos de su vida". Pese a estar enfermo "se había puesto guapo" para ver a su familia. "Había logrado ponerse una camisa y una chaqueta de punto y había conseguido llegar andando hasta la ventana". Desde ahí pudo contemplar la imagen de sus hijos y sus nietos en la calle saltando y gritando para darle ánimos. Fueron apenas "un par de minutos, porque se cansa mucho y tiene que volver a la cama, pero han sido sin duda un par de los mejores minutos de mi vida. Y de la suya, estoy convencida", ha afirmado con rotundidad.