Andrés Calamaro ha cantado verdades afiladas, ha bebido en la copa rota y ha atravesado el tiempo sin documento, en total, 45 años, los que lleva sobre un escenario. Cantautor, músico, compositor, productor discográfico y, sobre todo, roquero y uno de los grandes que tiene el rock en español. El bonaerense –que también ha disfrutado de etapas de su vida en Madrid- habla con HOLA.com en un momento épico de una carrera llena de momentos épicos, después de recibir en Las Vegas su sexto Grammy por la canción Hong Kong, un tema que canta junto al madrileño C.Tangana. Este reconocimiento –en una edición en la que partía con tres nominaciones- es la guinda para un año en el que ha sacado al mercado un nuevo disco, Dios los cría, un trabajo nominado a Mejor Álbum Vocal Pop y que contiene sus grandes clásicos cantados por él junto a artistas de la talla de Raphael, Lila Downs, Alejandro Sanz, Juanes, Leiva o Carlos Vives, entre otros. Mención aparte merece el tema Bohemio, que también figura en este disco y que es una colaboración con Julio Iglesias por la que fueron nominados a Mejor Grabación del Año. Una experiencia que el propio Calamaro narró en Julio Iglesias, del hombre a la leyenda, el primer podcast de ¡HOLA!
- Más de 40 años encima de los escenarios y ahora, hace unos días, recoges el Grammy Latino a la Mejor canción de pop/rock por "Hong Kong". ¿Es el madrileño Tangana el nuevo genio de la música?
C Tangana es un talento que contrasta, un artista arquitecto del pop de esta época. Privilegiado yo que comparto un premio internacional con Pucho CT. Me ha devuelto a la cresta de la ola.
- ¿Qué nos puedes contar de la gala y de la celebración de este éxito?
No soy muy dado a las galas o las celebraciones pero confieso que gané en la ruleta. Asimismo canté una canción de Rubén Blades que fue distinguido “Person of the year”. Buenas sensaciones cantando con orquesta latina y recibiendo el premio con Pucho, Jorge, Cristián y los demás que compartimos esta grabación de autor.
- Hemos leído que te defines como admirador de Remedios Amaya. ¿De qué manera te ha influido? ¿Te consideras un apasionado del flamenco?
Remedios Amaya no me ha influido como cantante porque soy insuficiente, pero sí he advertido su excelencia… Los cantantes se dividen en dos grupos, Remedios Amaya y los demás. El flamenco me gusta mucho, respeto y admiro a los artistas del “arte y compás”. No soy un entendido pero habiendo percibido la hondura poética del género ya no hay vuelta atrás.
- Sabemos que Andrés Calamaro es taurino devoto, ciudadano rebelde, culto y conservador, amigo noble y generoso. ¿Estamos en lo cierto o nos equivocamos si te definimos así?
No tan conservador ni culto. SÍ soy amigo y defensor de la fiesta. Creo que prefiero no descartarme de más virtudes para no decepcionarle a usted. Lo niego todo.
- ¿Sigues escribiendo a diario?
Verdad es que llevo temporadas escribiendo todos los días, tendría que empezar a corregir todo lo escrito.
- Vuelves a girar, vuelves a España. ¿El parón de la pandemia te ha servido para preparar esta serie de conciertos mucho mejor?
Es la idea, volver cantando mejor; la ética del intérprete.
- ¿Los rockeros también lloran?, ¿sufren por amor?
Algunos ni lloran ni saben qué es el amor.
- Nominado al Grammy con la canción Bohemio. ¿Es un regalo divino cantar a dúo con Julio Iglesias?
Es una alegría y un gran privilegio, también es un regalo.
- ¿Para cuándo el ansiado dúo con Willie Nelson?
Estoy encantado con las mancuernas que hemos estrenado en (el disco) “Dios Los Cría”. Míster Nelson ni sabe que existo ni le voy a insistir mucho. Lo hubiera hecho espléndidamente.
- ¿A qué tiene miedo Andrés Calamaro?
Mis abogados me aconsejan no contestar eso.