El coronavirus no da tregua y menos aún la extendida variante ómicron, que sigue afectando a buena parte de la población tanto en España como fuera de nuestras fronteras. Una vez más por estas fechas, los Ortega Aldón han sido una de esas familias que veían cómo sus navidades quedaban seriamente marcadas y empañadas por el covid, después del contagio que sufriera el pequeño del clan hace ya algunos días. Su madre, Ana María, ha reaparecido en Año Nuevo para explicar ante los reporteros cómo está la situación en casa después del positivo del niño. Desde el interior de su vehículo, reconocía a su vez los días complicados que les ha tocado vivir confinados en el hogar sin poder estar cerca de todos sus allegados, como su progenitora, a la que reconoce echar mucho de menos. La mujer de Ortega Cano ha contado también que ella y su marido se han librado en esta ocasión del virus, sin saber muy bien el motivo ya que estaban en permanente contacto con su hijo.
Ana María Aldón acaba la Nochebuena en el hospital con su hijo José María
El pasado 24 de diciembre, José María Ortega Aldón comenzó a tener síntomas propios del coronavirus antes de sentarse a cenar para celebrar la Nochebuena con todos los suyos, lo que obligaba a su madre a llevarlo al hospital para saber con certeza qué padecía el pequeño de ocho años. Los resultados daban positivo en covid, aunque por suerte la cosa no iba a más y tres días después tanto él como sus padres, que dieron negativo en el test, se encontraban "bien". Así lo contaba el lunes el propio diestro, que era captado primero saliendo de un establecimiento después de hacer unas compras y, posteriormente, hacía este breve apunte sobre el estado de salud de su familia a las puertas de su domicilio madrileño. Mientras, su esposa sí explicaba con más detalle cómo estaba el panorama tras lo vivido. "Tengo clarísimo que el niño se ha contagiado en el colegio", transmitía con pesar la diseñadora.
Las navidades agridulces de Ortega Cano tras el confinamiento de Ana María Aldón y su hijo por covid
"He estado vigilándole constantemente para ver si eran placas, pero en ningún momento" había sido así, proseguía. Felizmente, "ya no tiene fiebre ni está destemplado", por lo que los efectos del virus "han remitido pronto", se congratulaba. "Pero bueno, seguimos aquí confinados y lo que más me fastidia es no poderme ir a Cádiz, una vez que mi niño y los demás estamos bien", explicaba. "El año pasado nos pasó lo mismo. Todos tuvimos el virus y tampoco pude estar con mi familia", recordaba Ana María. El viernes anterior, la mujer de Ortega Cano hacía saltar las alarmas cuando compartía una imagen con su hijo desde el centro médico. "Con la ilusión que tenía por Papá Noel y al final nos vemos aquí", lamentaba sobre los deseos del pequeño, quien llegaba a marcar un 39,5 de temperatura corporal y esto les hizo permanecer aislados en una habitación mientras esperaban los resultados de la PCR.