La ciudad de Marbella es el lugar elegido para la despedida de Manolo Santana, quien fallecía este 11 de diciembre a los 83 años. La capilla ardiente del deportista, que pasará a la historia por ser pionero en el mundo del tenis de nuestro país, se instalará a partir de las diez de la mañana de este domingo en el Hospital Real de la Misericordia. Este centro cultural que fue fundado por los Reyes Católicos estará abierto hasta las dos del mediodía para que todo el que quiera pueda despedirse del tenista y mostrar sus condolencias a su círculo íntimo. Sin embargo, a partir de esa hora el acceso se limitará y será íntimo ya que tan solo podrán acceder las personas que forman parte de su entorno más cercano.
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Manolo Santana nació en Madrid y fue en la capital donde empezó a interesarse por lo que más tarde sería su profesión al trabajar como recogepelotas en un exclusivo club de tenis. Sin embargo, ha sido en Andalucía donde ha pasado buena parte de su vida, concretamente en Marbella, donde se han decretado dos días de luto por su fallecimiento. "Marbella lamenta tu ausencia, pero nos queda tu enorme legado. Uniste tu nombre a nuestra ciudad durante décadas y fuiste uno de sus más grandes embajadores. Leyenda del deporte e Hijo Adoptivo de Marbella, gracias por tanto, Manolo. Te echaremos de menos y nunca te olvidaremos", ha explicado la alcaldesa de la ciudad, Ángeles Muñoz.
A lo largo de su carrera laboral, en la que destaca por ser el primer español que ganó Roland Garros además de otros Grand Slams, Santana ha recorrido todo el mundo. Fue precisamente durante un viaje que hizo para participar en un torneo cuando conoció Marbella y decidió convertirlo en su lugar de residencia. El tenista fue uno de los protagonistas de la etapa de mayor esplendor de este enclave de la Costa del Sol, en la que ha permanecido hasta sus últimos días. En julio de 2018 el Ayuntamiento lo nombró Hijo Adoptivo de la ciudad por ser "un modelo de responsabilidad, prudencia, humildad, profesionalidad, educación, integridad y generosidad, además de un ejemplo de contribución a la sociedad". En Marbella fundó además en 1997 el Manolo Santana Racquets Club en Marbella con el objetivo de difundir “un tenis para todos” y descubrir nuevos talentos.
Han pasado ya cuatro décadas desde que Manolo Santana se retiró de la competición y se convirtió en un mentor para nuevas generaciones que han encontrado en él un ejemplo y también un amigo tal y como queda patente en las palabras de cariño que le han dedicado compañeros como Rafa Nadal, Garbiñe Muguruza, Fernando Verdasco, Conchita Martínez, Feliciano López o Emilio Sánchez Vicario, entre otros. Además, él siempre ha seguido vinculado al mundo del tenis y ha apoyado este deporte que tantas alegrías le dio y en el que cosechó un brillante palmarés. Este mismo verano le veíamos jugando en unas imágenes que se hicieron virales y en septiembre acudió por última vez a un acto público del Mutua Madrid Open, torneo que impulsó y en el que ejercía actualmente como presidente de honor.
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