Alec Baldwin sigue roto de dolor. El actor y productor estadounidense no pudo evitar ponerse a llorar desconsoladamente al describir cómo mató accidentalmente a la directora de fotografía de Rust, Halyna Hutchins, durante una entrevista con George Stephanopoulos para la cadena ABC. El marido de Hilaria Baldwin y padre de siete hijos revela el horror que sintió cuando cogió el arma y se disparó, causando la muerte de su compañera e hiriendo al director de la película, Joel Souza. "Mirando atrás pienso: '¿Qué podría haber hecho?'", señala en un adelanto de la entrevista que se emitirá hoy en televisión.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
-Las imágenes de Alec Baldwin, instantes después de la tragedia
Él insiste en que nunca apretó el gatillo y dijo que la pistola se disparó inexplicablemente por sí sola. "No apreté el gatillo, yo no apreté el gatillo", repite una y otra vez, llorando y haciendo alguna pausa para tomar aire o limpiarse las lágrimas. "Nunca apuntaría con un arma a nadie con el gatillo, nunca'', reitera desconsolado. Aún se desconoce por qué el arma estaba cargada con una bala real. "Alguien puso una bala real en el arma, una bala que ni siquiera se suponía que estuviera en la propiedad", puntualizó Baldwin, que a lo largo de toda la charla repasó al detalle lo que sucedió en el set ese día.
Un experto en armas ya manifestó en TMZ que el tipo de pistola que sostenía Baldwin tenía un gatillo sensible "que podía activarse con una ligera presión.
De momento la investigación sigue su curso, pero se especula con la posibilidad de que la bala que causó la muerte de Halyna Hutchins puso ser proporcionada por un armero de Nuevo México, que suministró de una película anterior en la que se usaba munición improvisada para entrenar a los actores en un campo de tiro. Los detectives continúan investigando si Seth Kenney, de 51 años, que se suponía que debía proporcionar a la película cartuchos falsos y balas en blanco, pudo haber enviado balas recicladas de un set anterior, según una declaración jurada presentada por la Oficina del Sheriff del condado de Sante Fe.
De momento no se han presentado cargos penales, pero tras el accidente mortal, Alec Baldwin y algunos miembros del equipo de Rust han sido demandados por negligencia. La supervisora de guión Mamie Mitchell anunció entre lágrimas que demandó Baldwin, acusándose de haber jugado a la 'ruleta rusa' cuando disparó un arma sin verificarla primero para asegurarse de que no estaba cargada, y además afirmó que en la escena que estaba siendo filmada no figuraba que esa pistola tuviera que ser disparada. Del mismo modo, Serge Svetnoy, el jefe de iluminación que sostuvo a Hutchins en sus brazos cuando murió, también demandó al actor y a varios miembros del equipo, como al subdirector asistente, David Halls, y a la encargada del control de las armas, Hannah Gutierrez-Reed.
--El asistente que le dio el arma a Alec Baldwin rompe su silencio
Durante la entrevista quedó de manifiesto la buena relación que mantenía Alec Baldwin con Halyna Hutchins: "Ella era alguien querida, apreciada y admirada por todos los que trabajaban con ella. Incluso ahora me cuesta creerlo, simplemente no me parece real''. En un momento de la conversación, George Stephanopoulos le pregunta si esto es lo peor que le ha ocurrido en la vida, a lo que Baldwin responde sin dudarlo y con un gran pesar: "Sí". A raíz de que ocurriera la tragedia, el intérprete de películas como Beetlejuice y La caza del Octubre Rojo ha estado en permanente contacto con el marido y el hijo de Halyna.
Baldwin anunció que se retiraba temporalmente para recuperarse y se refugió en su familia: su esposa, Hilaria, los seis hijos que comparte con ella, y su hija mayor Ireland, nacida de su matrimonio con Kim Basinger. Su mujer, muy preocupada por la salud mental de sus seres queridos, ha revelado que mantuvo algunas conversaciones 'desgarradoras' con sus hijos después del tiroteo accidental. "Puedes imaginar lo desgarrador que ha sido. Agradezco al Child Mind Institute por guiarme y a mi amiga Anne por acercarme a ellos. A veces me quedo paralizada, sabiendo que soy la persona adulta que debe guiar a su familia, pero a veces estoy tan perdida como en la dirección correcta. No hay ningun manual para esto".