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A finales de junio ¡HOLA! publicaba una noticia inesperada: después de trece años de matrimonio y cuatro hijos en común Manuel Martos y Amelia Bono se separaban. Una decisión que habían tomado de forma amistosa y sin que existieran terceras personas. Aunque no es muy dado a hablar sobre su vida privada, Manuel ha querido pronunciarse sobre la relación que mantiene con su exmujer -que ha encontrado en Fernando Ligués su nueva ilusión- durante el viaje que ha hecho recientemente hasta Tenerife. Allí ha arropado a su padre, Raphael, que recibía el Premio Dial por su larga trayectoria como cantante. Además, nos ha contado cómo es trabajar codo con codo con él y nos ha hablado de cómo está siendo su última gira.
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-Bueno, Manuel, vuelven los Dial a Tenerife después de un año de parón debido a la pandemia y encima esta es una edición muy especial, porque dan un premio a la trayectoria de tu padre y tú estás aquí acompañándole.
-Sí, sí, es muy bonito. Que vuelva la normalidad es importantísimo, que los artistas puedan viajar, cantar... al final, ejercer su profesión y toda la gente que además se dedica y que rodea al artista musical. Y luego, en el lado personal, muy bonito que a mi padre le vuelvan a reconocer toda su trayectoria. Para él es muy importante, más siendo el 60 aniversario. Es un año muy bonito y muy importante. Y todos los premios, la verdad, es que son muy bonitos y este en especial le hace mucha ilusión.
-Un gran artista que sigue al pie de cañón.
-Sí, sí, no para. Es increíble, está en plena gira con nuevo disco, con nuevos proyectos. Hablas con él y te agota solo de hablar y de saber los proyectos que tiene en la cabeza. Y es una maravilla. Él se sigue encontrando fenomenal, está mejor que nunca y por muchos años.
-Además, este año también se hizo el documental sobre su vida, Raphaelismo, y le vimos en San Sebastián muy emocionado y acompañado por toda la familia, que le apoyó. ¿La familia es muy importante para seguir adelante?
-Sí, siempre somos una familia muy unida y le hemos apoyado en todo. Yo, de hecho, trabajo con él desde hace muchos años. Y el documental, la verdad, es que es muy bonito, está hecho de maravilla. Yo, lógicamente, siempre digo que soy poco objetivo porque al final es mi vida también. Es parte de mi vida, pero es muy interesante, tanto para la gente que le sigue, los fans, como para la gente que a lo mejor no lo ha sido tanto. Al final, es una vida en la profesión de muchos años, donde ha pasado de todo y yo creo que a la gente le va a gustar muchísimo cuando lo vea. Le va a gustar mucho y se va a hablar mucho.
-¿Cómo es poder trabajar con tu padre?
-Es un lujo, ya te digo. Es una clase diaria de cómo hay que hacer las cosas y de cómo ser un buen profesional, que es muy importante. No solo hay que tener el talento, también muchas otras cosas para ser un buen profesional y él lo ha sido siempre y lo sigue siendo. Sigue aprendiendo día a día, sigue evolucionando, no se conforma con lo que ya ha hecho y ese creo que es el secreto.
-¿Alguna vez esa confianza padre-hijo ha sido un problema en el tema laboral?
-No, no, al revés. Yo creo que se nos permite hablar entre los dos de una manera mucho más natural. No hay ese miedo del artista y la persona que trabaja a su lado. Hay una confianza muy grande y también hay que saber hacerlo. Quiero decir, que a veces hay que saber dónde están las distancias y cómo decir las cosas, pero nunca lo vi como un problema, al revés, es una ventaja.
-Tú, como hijo, dices que le ves muy bien, que está en un buen momento, pero, por ejemplo, en el caso de Concha Velasco, hace unos meses que los hijos eran partidarios de su retirada. ¿Tú te planteas eso con tu padre o le ves disfrutar y quieres que siga ahí?
-A ver, ahora mismo no. Entiendo que no hay nada mejor para cualquier persona que ser sincero y ayudarle, y estar a su lado para decirle las cosas tal como son. En el caso de mi padre, él está maravilloso, está fantástico y está haciendo sus conciertos increíbles. Se encuentra en plenitud de facultades. Y no solo no me lo planteo, sino que no lo veo ni cercano. Al estar a su lado y al querer a esa persona, al tenerle el cariño que se le tiene que tener e importarle, al final le aconsejas como tú crees.
-Manuel, recientemente hicisteis pública la noticia de tu ruptura con Amelia. Seguís haciendo planes, sois una familia y los niños son muy importantes, ¿pero en qué momento estáis?
-Pues nada, normalidad total. Muy bien, muy felices. Somos y seguimos siendo una familia y nada más. De verdad te lo digo, muy felices y muy bien.
-Es muy importante también que exista un buen ambiente.
-Y sobre todo cuando es real.
-¿Te alegras por ella?
-Por supuesto, lo importante es que todos seamos felices.
-¿Y tú?
-Bien, muchas gracias.
-¿Cómo estás del corazón, Manuel?
-Gracias.