Garbiñe Muguruza se acaba de convertir en la maestra del tenis mundial. La tenista española ha ganado el prestigioso campeonato individual Akron WTA Finals, en Guadalajara, México, y se ha hecho con la codiciada copa. Al subirse al podio, no solo presumió de trofeo, sino también de apuesto novio. La número seis del mundo en el ranking de la WTA posó junto a Arthur Borges, su nueva ilusión.
Borges es un atractivo exmodelo internacional, de origen alicantino y sangre finlandesa, que trabaja para la firma de moda Tom Ford. Tal como se puede ver en sus redes sociales, es un gran apasionado del deporte y la fotografía y ha desfilado para marcas como Zegna, Armani o Hugo Boss. Según ha trascendido, estuvo casado con la patinadora artística finlandesa Kiira Korpi, conocida como “la princesa de hielo”. Tras once años de relación y tres de matrimonio, la pareja se divorció este verano.
Por el momento, Garbiñe no ha querido hacer comentarios sobre su relación, pero hay sonrisas que lo dicen todo.