Este 2021 ha sido testigo de numerosas separaciones y divorcios inesperados. Un mes antes de despedirnos del año ha trascendido que el estilista Pelayo Díaz y su marido, Andy McDougall, han dedicido emprender caminos separados después de tres años de matrimonio, tal y como ha adelantado la revista Lecturas. Al parecer se trata de una ruptura amistosa y en buenos terminos,de la que de momento no se han pronunciado los protagonistas. El estilista y su marido llevarían haciendo vidas por separado desde septiembre y desde el pasado mes de agosto no comparten ninguna foto juntos en sus perfiles de redes sociales, donde solían publicar fotos muy bonitas con las que gritaban a los cuatro vientos lo felices que eran.
El estilista asturiano, conocido por su paso por el programa Cámbiame, y el empresario argentino se dieron el 'sí, quiero' en septiembre de 2018. Antes de su boda nada hacía presagiar que solo durarían tres años, ya que desde el comienzo de su relación se mostraban completamente enamorados el uno del otro y no dejaban de dedicarse palabras y gestos románticos. Lo suyo fue un amor a primera vista. Tan solo seis meses después de conocerse ya sabían que estaban hechos el uno para el otro , se comprometieron y anunciaban emocionados su boda.
-Pelayo Díaz, tras su encuentro con la Reina: 'Es una mujer que impone'
-Pelayo Díaz vuelve a la televisión con 'mucho ritmo'
"Llevo toda la vida buscando a Andy. ¿Cómo va a ser poco tiempo seis meses? (...) La gente que ha encontrado el amor de su vida, se da cuenta. Se siente. Hay cosas que no se pueden explicar", confesaba Pelayo, que mostraba orgulloso su original anillo de compromiso, que simulaba un clavo girado de la colección Juste un clou de Cartier. El experto en moda compartió entonces la ilusión que le había hecho que le pidieran matrimonio. "Me lo pidió con un trozo de pan sin miga (...) Pensé que iba a ser algo clásico, pero me he dado cuenta de que nada es clásico en mi vida", comentaba riéndose. De hecho, tal y como contó en Lecturas, la pedida tuvo lugar en un restaurante que fue casa de Brigitte Bardot y fue un momento muy romántico e idílico tal y como desvelaron los protagonistas.
Todo parecía ir viento en popa. Sin embargo, poco después de contraer matrimonio comenzaron a surgir rumores de que las cosas no iban bien entre ambos. Las continuas ausencias del marido de Pelayo comenzaron a preocupar en cierto modo a sus fans, aunque el colaborador televisivo salía al paso de las especulaciones. "“Que no veáis a Andy todo el tiempo en Instagram no significa que no estemos el uno al lado del otro. Vivimos, trabajamos y viajamos juntos todo el rato", aclaraba. Lo cierto es que con el tiempo y después de haber confirmado que habían sufrido "pequeñas crisis", su historia de amor no ha podido ser y la pareja ha emprendido su vida por separado.