La isla de las tentaciones ha vuelto con su cuarta temporada en una noche repleta de tensiones entre los concursantes desde el inicio de la aventura. En esta ocasión Josué y Zoe, Alejandro y Tania, Darío y Sandra y Nico y Gal.la pondrán a prueba su amor, además de una quinta pareja que se anunció por sosrpresa en el estreno, formada poe Rosario y Álvaro. Los primeros roces entre los protagonistas llegaron con las presentaciones de los veinte tentadores y tentadoras con los que convivirán en sus respectivas villas, sobre todo porque algunos de ellos ya se conocían del pasado. Pero fue el momento del reparto de collares, a través de los que los solteros indican cuál de los concursantes les ha gustado más, el que más hizo enfadar a las parejas. Sobre todo a Zoe que, muy molesta porque su chico era quien más collares había recibido, se levantó de su sitio para quitarle el que le había puesto Diriany, una soltera que aseguró "ir a por Josué" y con la que la concursante protagonizó el primer ataque de celos de la temporada.
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La 'Ceremonia de collares' comenzó con el grupo de las chicas. Sandra se proclamó la gran triunfadora con un total de tres, algo por lo que su novio se mostró preocupado; Zoe, Tania y Rosario se hicieron con dos cada una; y, por último, Gal·la terminó con un solo collar, proveniente del único soltero que había confesado que le llamaba la atención. Con sus respectivos novios siendo testigos de la situación, la primera mitad de la ceremonia tuvo momentos de tensión pero terminó de forma tranquila.
No ocurrió lo mismo cuando llegó el turno de sus chicos, a los que las solteras distribuyeron sus collares. Entre diferentes rifirrafes entre las chicas y las tentadoras, fue el momento en el que Josué consiguió su cuarto collar el que consiguió que Zoe estallara por completo. La razón fue que era Diriany quien se lo había colocado, una soltera que dejó a los chicos con la boca abierta en su presentación, en la que aseguró ser una mezcla entre Angelina Jolie y Rihanna. "Ya te digo yo que a él le voy a gustar, al del pelito azul", avanzó respondiendo a las risas de Zoe y dejando claro que Josué era su preferido.
En cuanto Diriany terminó de colocar el collar a Josué, Zoe se levantó y se dirigió a su novio dispuesta a quitárselo. "Me parece genial que te hayan dado a ti todos los collares, pero este, no", dijo la barcelonesa que continuó, visiblemente molesta: "No me da la gana que tengas citas con chicas maleducadas". Un gesto que sentó muy mal a su novio, que le recriminó que él tendría citas con quien quisiera y le pidió el collar de vuelta. "Si estamos aquí, en parte, es por tu desconfianza, por tus celos, porque tú siempre tienes que hacer lo que te dé la gana y por eso estamos discutiendo. Podrías haber venido a darme un beso, en vez de quitarme el collar", zanjó Josué ante el primer ataque de celos de su pareja en La isla de las tentaciones.
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Un encontronazo que se convirtió en el gran protagonista del primer episodio y del que Zoe salió con malas sensaciones de cara al inicio del concurso: "No he visto a mi novio con toda la seguridad de que me quiere, que está a tope conmigo. Lo he visto muy pasota y no estoy bien", explicó ante las cámaras. Aunque aún es pronto para vaticinar si Diriany supondrá una tentación para Josué, lo cierto es que han demostrado cierta conexión desde el principio y el malagueño la ha elegido para su primera cita: "Comprendo que le haya molestado, pero no voy a ser un tonto, intenta coaccionarme siempre y no es la primera vez", decía sobre el enfado de su pareja. "Lo tengo claro, he venido a demostrarme que soy capaz de aguantar la tentación y demostrarle a Zoe que no tiene por qué temer y tiene que empezar a confiar en mí", zanjó intentando tranquilizar a su novia.
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