En medio del interés que está generando la próxima emisión de la segunda parte de su docuserie, Rocío Carrasco reapareció en público la semana pasada para acudir a los juzgados de Alcobendas, de Madrid, en compañía de su abogado, Javier Vasallo. ¿El motivo? La demanda que ha presentado su hermana, Gloria Camila, solicitando diligencias preliminares con el fin de evitar que salgan a la luz los escritos de su madre, que la mayor de los tres hijos de la Más Grande entregó a la jueza para que determine si pertenecen a la “intimidad familiar” y prohibir, de ser así, que vean la luz.
A la salida, Rocío comentó que “al final me he visto obligada a aportar un documento, el único que no me hubiese gustado aportar nunca en la vida” y, tras manifestar su sorpresa por no encontrarse con Ortega Cano, defendió a su hermana: “La pobre es la que menos pinta en esto”. Cabe destacar que su reaparición se produjo el mismo día que su exmarido, Antonio David Flores, confirmaba su separación de su mujer, Olga Moreno, noticia sobre la que evitó manifestarse.