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El pasado año fue el más duro de la vida de Esther Doña ya que perdió a dos pilares fundamentales. Su marido, el marqués de Griñón, y su padre fallecieron con escasos meses de diferencia, ambos por la misma causa, el coronavirus. El 2021, sin embargo, le ha dado una nueva oportunidad para ser feliz y está siendo completamente opuesto. La ilusión y la alegría han vuelto a llenar los días de la empresaria, quien ha recuperado la sonrisa gracias a Santiago Pedraz. Al lado del juez ha iniciado una relación que este verano adelantó ¡HOLA! en primicia y que va poco a poco avanzando. La última muestra de esa consolidación ha llegado este fin de semana al sumarse a los planes de la familia de su pareja, en la que parece sentirse muy integrada.
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© @estherdona_oficial"Pedraz´s family", ha dicho Esther con una enorme sonrisa y mostrando algunos de los detalles de cómo está pasando la jornada. Junto a su pareja y los seres queridos del magistrado ha puesto rumbo al municipio de Cuéllar, que tiene aproximadamente 10.000 habitantes y se ubica en el límite entre las provincias de Valladolid y Segovia. En este rincón castellanoleonés han disfrutado de una agradable comida otoñal dispuesta en una mesa larga y su posterior sobremesa al calor de la chimenea. Sin duda, un ambiente perfecto para conocerse más mutuamente, charlar y compartir inquietudes. "Sus hermanos son de lo más cariñosos conmigo y sus tres hijos, totalmente adorables. [...] Siempre me agradecen lo feliz que es Santi ahora, a mi lado, a lo que yo les contesto que en el amor no hay que agradecer, es cosa de dos", explicaba en un excepcional reportaje de ¡HOLA! en el que ambos posaban juntos por primera vez como pareja.
© @estherdona_oficialEsther Doña, que nació en diciembre de 1977 en Málaga, acaba de publicar La vida de un gran hombre a través de mis ojos (Planeta), las memorias de su vida junto a Carlos Falcó. El recuerdo del aristócrata, al que conoció en 2015 y con el que contrajo matrimonio dos años más tarde, sigue muy presente en su día a día y está convencida de que ha sido él quien ha puesto en su camino al juez Pedraz para devolverle la felicidad tras enviudar. No en vano, recuerda que se admiraban mutuamente y el propio marqués de Griñón, que siempre pensaba en todo, dijo un día en casa durante una reunión de amigos que el día que él no estuviera, Santiago era el hombre que le gustaría para su esposa.
La fuerza y el optimismo nunca ha abandonado a la empresaria. Siempre ha seguido con entereza hacia adelante a pesar de los avatares del destino y ahora atraviesa una etapa plena en el que su futuro se presenta lleno de sorpresas y buenos momentos. Tras dejar el palacio de El Rincón en el que vivía con el Marqués y reformar el piso de soltera que tenía en Madrid, ha vuelto a instalarse en esta vivienda y no descarta compartirla más adelante con Santiago, al que define como un hombre tierno, dulce, generoso, atento y muy divertido. Además, Esther explica que ambos comparten valores que son para ella vitales como ser familiar y amigo de sus amigos.
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