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La polémica sigue muy presente en la vida de Britney Spears. Después de meses de lucha legal para poner fin a la tutela legal de su padre, que ha controlado la vida y las finanzas de la cantante durante trece años, y que ha logrado después de que él presentará su renuncia formal ante un tribunal de Los Ángeles y un juez le destituyera, la cantante ahora acusa a su madre, Lynne Spears, de ser cómplice e instigadora de la tutela legal ejercida por su padre, Jamie Spears.
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La princesa del pop señala a su madre como culpable de la tutela que ejerció su padre en un mensaje que compartió con sus seguidores pero del que se arrepintió y no tardó en borrar. En él decía: "Me he dado cuenta de que hace mucho que no sonrío y mi madre se preocupa diciendo 'estás actuando rara, ¿qué te pasa?", comienza antes de comenzar a lanzar una lista de reproches a su progenitora. Britney asegura que se siente como nueva y ataca a Lynne: "Antes era un negocio familiar, pero ya no. Hoy he nacido porque puedo sonreír, así que gracias por salir de mi vida y permitirme vivirla".
La intérprete de Ops, I did it again acusa directamente a Lynne de estar detrás de todo el entramado. "Mi padre empezó con la tutela hace 13 años, pero lo que la gente no sabe es que mi madre es la que le dio la idea. Nunca recuperaré esos años, ella arruinó mi vida en secreto y sí, la señalaré a ella y a Lou Taylor por ello". Lou Taylor fue la portavoz oficial de la familia Spears durante muchísimos años y la acusa tanto a ella como a su madre de que ambas sabían perfectamente lo que estaba pasando y lo han consentido durante todos estos años. "Mi padre no era tan listo como para pensar en una tutela legal... pero esta noche me centraré en saber que tengo una vida nueva por delante", finaliza su mensaje.
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El motivo del enfado de Britney podría deberse a que su madre le reclama ahora una grandísima cantidad de dinero que se ha gastado para ayudar a su hija a librarse del control paterno. Según los documentos judiciales obtenidos por la revista People, Lynne pide un total de 560.000 euros que fueron utilizados para ayudar a su hija Britney "a liberarse de una existencia muy controladora". Asimismo, los documentos indican que la artista "accedió entusiasmada" a que su madre le ayudara con la tutela legal y Lynne llegó a un acuerdo con los abogados en el que se pactó que se pagaría por los esfuerzos realizados en su nombre y los honorarios incluidos mientras trabajaba para su hija.
