A pesar de mantener su día a día con total discreción, Victoria de Marichalar nunca ha dejado de llamar la atención con su imagen. De hecho, muchos han sido lesos medios de comunicación que han situado a la joven como un referente de estilo. Sin embargo, a sus veintiún años recién cumplidos, la hija de la infanta Elena ha experimentado una serie de cambios, con los que ya ha iniciado un nuevo rumbo en su vida. Por un lado, ha empezado a compartir sus publicaciones en redes sociales, abriendo así una ventana a su ámbito privado al gran público. Pero Vic, que es como la llaman sus amigos de manera cariñosa, también ha protagonizado su primera aparición en una alfombra roja. Lo ha hecho este jueves 28 de octubre, en Sevilla, donde ha tenido lugar la entrega de premios de la revista Elle.
La sobrina de Felipe VI no ha acudido a la cita con su novio, Jorge Bárcenas, ya que el DJ ha tenido que quedarse en Madrid para cumplir con sus compromisos profesionales. En su lugar, ha disfrutado de la velada con el matrimonio formado por la influencer María García de Jaime y Tomás Páramo, a quienes conoció en Marbella antes de la pandemia.
Los artífices de su imagen elegante y sofisticada
En Sevilla, Victoria ha sorprendido con un nuevo look, mucho más sofisticado. Lo ha logrado con un espectacular diseño confeccionado por Lorenzo Caprile, que ha completado con unos pendientes de estilo art déco y unos zapatos joya. El vestido, elaborado en terciopelo azul, ha sido un acierto, puesto que ha resaltado su estupenda silueta. El traje también ha presentado otros elementos muy favorecedores, como sus marcadas hombreras, su gran escote trasero —que ha dejado su espalda al descubierto— y la apertura de la parte inferior del diseño, con el que ha conseguido un toque sexy. Sin duda, Victoria ha dado en la diana al contar con el que ya es su modisto de cabecera —Caprile la vistió en su puesta de largo— y también el de su madre —imposible no recordar el vestido de inspiración goyesca que llevó la infanta Elena en la boda de Victoria de Suecia, en 2010—. Otro de los grandes aciertos que ha presentado la sobrina de Felipe VI en su aparición estelar ha sido recoger su melena en una coleta alta y de acabado ultrapulido, realizada por el estilista Sandro Nonna. Sin duda, una imagen impecable con la que Victoria ha consolidado su estatus de referente de estilo.
A pesar de todos estos llamativos cambios en su vida, la hija de la infanta Elena no ha descuidado su formación académica. De hecho, continúa volcada en la carrera de Administración y Dirección de Empresas, que cursa en The College for International Studies (CIS), en Madrid, donde también han estado estudiando su hermano, Felipe de Marichalar, y la exnovia de este, Mar Torres. Por su parte, Jorge Bárcenas, con el que inició su relación en verano de 2019, compagina su exitosa carrera de DJ con sus estudios en Marketing y Digital Business en la escuela de negocios ESIC. De momento, los dos no comparten techo. En declaraciones de Jaime de Marichalar, recogidas por El Mundo, su hija sigue viviendo con su madre. De esta forma, ha desmentido los rumores sobre la pareja difundidos a lo largo de estos últimos días.
Turismo en Sevilla tras coronarse como la nueva ‘princesa’ de la moda
El pasado 28 de octubre fue un día clave en la vida de Victoria Federica. Ese jueves, la sobrina del Rey Felipe VI decidió abrir su perfil de Instagram y convertirse oficialmente en la primera influencer española de la realeza. Solo unas horas más tarde de abrir al público sus redes sociales, protagonizó su primera alfombra roja, en la fiesta de una conocida revista. La hija de la infanta Elena sorprendió al lucir un espectacular vestido de Lorenzo Caprile, perfecto para esta nueva etapa de la nieta de los Reyes eméritos como ‘princesa’ de la moda. Unas imágenes que fueron compartidas y analizadas por miles de personas. Tan solo unas horas después de tomar esa decisión, Victoria Federica ya había conseguido más de sesenta mil seguidores.
Tras su debut posando incluso para los fotógrafos, la joven amaneció en el hotel Alfonso XIII de la capital —llamado así porque fue su tatarabuelo quien lo inauguró, en 1928— acompañada de sus buenos amigos el matrimonio formado por los también influencers María García de Jaime y Tomás Páramo. Después del primer día de su nueva vida como estrella de las redes sociales, la hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar se dedicó a realizar turismo por las calles de Sevilla, donde sus padres, hoy separados, se casaron, en 1995. La capital hispalense ha vuelto a convertirse en un escenario importante en la vida de la familia Marichalar y Borbón.