Fue a finales del pasado mes de junio cuando, en este mismo espacio, anunciábamos la separación de Amelia Bono y Manuel Martos. Un punto final inesperado en su bonita historia de amor, ya que ellos siempre habían sido un ejemplo de pareja ideal y se habían mostrado siempre unidos, contra viento y marea, durante sus trece años de matrimonio. Según pudo saber ¡HOLA! por entonces, llevaban un tiempo distanciados y su decisión de tomar caminos separados la tomaron de forma amistosa y sin que existieran terceras personas.
Durante este verano, han demostrado ser unos ex muy bien avenidos, tanto que incluso se llegó a especular con que podrían haberse dado una segunda oportunidad, ya que pasaron parte de las vacaciones juntos con sus cuatro hijos —Jorge, de doce años; Manuel, de once; Gonzalo, de siete, y Jaime, de cuatro—, dejando claro que sí se puede mantener una relación de amistad y seguir siendo una familia unida a pesar de no ser ya una pareja.
Ahora, tres meses después de conocerse su ruptura, parece que el amor ha llegado de nuevo a la vida de la mayor de los cuatro hijos del expolítico José Bono, quien, hace unos días, era fotografiada, en Sotogrande, muy cariñosa, con un nuevo acompañante. Fueron captados por el objetivo de las cámaras, en el puerto de la urbanización gaditana, dando un paseo y, después, estuvieron disfrutando juntos de un almuerzo.
Amelia y Manuel Martos han demostrado este verano ser unos ex muy bien avenidos y viven centrados en el bienestar de sus cuatro hijos, que son el motor de sus vidas
Su nueva ilusión se llama Fernando Ligués, es licenciado en Ciencias Empresariales, tiene cuarenta y siete años y es de Madrid, donde trabaja como directivo de una multinacional.
Una nueva Amelia
En este último año, además de su situación personal, la vida profesional de Amelia también ha experimentado un cambio, como ella misma nos confesaba, hace unas semanas, en un reportaje que publicábamos en páginas de ¡HOLA!: “Después de unos años al frente de varias tiendas de joyería, comienzo una nueva etapa donde mi día a día profesional es mi familia virtual en redes sociales”. A sus cuarenta años recién cumplidos y con casi 400.000 fieles seguidores en sus redes sociales, se va a volcar, a partir de ahora, en su faceta de prescriptora de tendencias y estilo de vida, con la que ha sorprendido no solo por su forma de ver y vivir la moda, sino por su gran sentido del humor.
Han disfrutado, estos días festivos, de paseos por el puerto de la urbanización gaditana, rutas en bicicleta, almuerzos y salidas nocturnas
Al preguntarle en el citado reportaje sobre sus próximos planes, después de este giro de su vida, Amelia nos respondía: “Miro al futuro con ilusión, optimismo, deseando seguir disfrutando de mi familia y amigos y, sobre todo, viendo felices a mis hijos, que son el motor de mi vida”.