Kiko Rivera, el gran ausente en el funeral de su abuela en Cantora

La misa se celebró el pasado 9 de octubre en la finca familiar, a la que asistieron los familiares más cercanos a la difunta, entre ellos sus hijos Agustín, Juan e Isabel, así como sus nietas Isa y Anabel Pantoja

Actualizado 11 de octubre de 2021 - 17:15 CEST11 oct 2021 - 17:15 CEST

El pasado sábado 9 de octubre, cuando se cumplían diez días del fallecimiento de doña Ana Martín, la familia Pantoja celebró una misa funeral en su memoria tras los muros de Cantora, la finca en la que falleció y en la que durante muchos años fue tan feliz la madre de Isabel Pantoja. Un último adiós que se vivió en la mas estricta intimidad y con la habitual discreción con la que han llevado los últimos acontecimientos en torno a su muerte. Al oficio religioso asistieron sus familiares más cercanos, entre ellos sus hijos Agustín, Juan e Isabel Pantoja, así como algunos de sus nietos como Isa y Anabel Pantoja, pero en la que hubo una detacada ausencia, la de Kiko Rivera. Una información que adelantó Terelu Campos en Viva la vida este fin de semana, y que han corroborado en el programa de Ana Rosa Quintana.

Los supuestos motivos de la ausencia del nieto de doña Ana son dispares, mientras unos aluden que el DJ quiso tratar de evitar el reencuentro con su prima Anabel tras el crudo enfrentamiento que ha vivido en las últimas semanas, otros destacan que el músico tenía que cumplir con un compromiso profesional que le impidió asistir al funeral de su abuela, a la que siempre consideró como una segunda madre. Su esposa, Irene Rosales, y sus hijas tampoco asistieron al oficio religioso. Horas antes del funeral se supo que el concierto del DJ en Cáceres había sido aplazado debido al éxito en la venta de entradas y la organización decidió posponer la fecha para conseguir permisos para ampliar el aforo.

Tras la muerte de su abuela, Kiko Rivera, que se encontraba en la isla La Graciosa para asistir a la boda de su prima, viajó de inmediato a Cadiz para abrazar a su madre, Isabel Pantoja, con quien llevaba un año sin hablarse. Tras ese primer y emotivo encuentro, el DJ señalaba que pronto volvería a visitarla en compañía de su mujer y sus hijas. Días después de ese emotivo instante de unión entre madre e hijo, Kiko ha concedido una entrevista a la revista Lecturas en la que cuenta qué sintió al ver a su madre. "Nos vimos y salimos corriendo a abrazarnos, durante 15 minutos. Fue un perdón sin palabras, sin decir nada nos lo dijimos todo", ha señalado.

Ahora que la reconciliación entre madre e hijo parece un hecho y los hermanos Francisco y Cayetano Rivera también han decidido dar un paso atrás en su demanda contra la cantante, el hijo de Isabel Pantoja ha comenzado otra guerra familiar, pero esta vez no con su madre, sino con su prima Anabel Pantoja, a la que acusa de traición y de haberle mentido sobre la situación con su familia durante todo este tiempo. El marido de Irene Rosales señala que su prima le dijo cuando falleció su abuela que no fuese a Cantora porque no sería bien recibido. "Mi prima cuenta su versión, pero hay testigos que escucharon cómo me decía que mi madre no quería que fuera a Cantora", asegura. La colaboradora dio su versión de los hechos en ¡HOLA!, asegurando que estaba muy feliz por el reencuentro entre madre e hijo y, de momento, a pesar de las declaraciones de su primo continúa guardando silencio para evitar más polémicas.