Llegaba el momento de abrir el baile. En la pista algunas de las mujeres más importantes de la vida de Elena Furiase -su madre, su tía Rosario, Mariola Orellana y sus hijas, varias amigas de la actriz y Sonsoles, la madrina de la ceremonia y madre del novio- estaban dispuestas a dar una sorpresa a los recién casados. Juntas cantaron una canción que habían compuesto especialmente para ellos con la melodía la música de la canción Eres tú el príncipe azul, de la conocida película de Disney La bella durmiente. Un momento muy emotivo en el que la novia sorprendió con un segundo look, ideal para la fiesta.
Cada vez son más las novias que optan por dos looks distintos para su gran día o se suman a la tendencia de los vestidos transformables que, con pequeños gestos, permite que el vestido evolucione sin tener que cambiase. En el caso de Elena, el llamativo vestido de mantones de Manila, dio paso a un diseño con escote bustier (confeccionado con la misma tela) y una falda midi en tafetán de seda blanca con vuelo. Una favorecedora silueta al más puro estilo New Look que recuerda a aquella creada por Christian Dior en 1947 durante la presentación de su primera colección de Alta Costura.
La transformación del vestido también necesitaba que el peinado y el maquillaje evolucionaran. Por eso Elena reemplazó la coleta por una melena extralarga texturizada con un hilado de trenzas, muy hippie, recogiendo los mechones delanteros para que los pendientes se siguieran viendo. “Para las mujeres flamencas la melena es un símbolo a la hora de bailar y de moverse. Ella quería hacer ese guiño en el momento de la fiesta”, nos cuenta Vicky Marcos, encargada de crear el maquillaje y el peinado de la actriz.
La maquilladora también nos explica que aunque mantuvo la misma sombra que hace que los ojos de Elena parezcan más miel, remarcó y alargó la mirada con una raya negra, consiguiendo un look más flamenco.