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Patrick Dempsey ha sido acusado de "aterrorizar al set" de Anatomía de Grey e incluso de provocar en sus compañeros de reparto todo tipo de estrés postraumático. Así lo narra un libro no autorizado, sobre la serie escrito por la periodista de Entertainment Weekly Lynette Rice y que lleva por título Cómo salvar una vida: La historia interna de Anatomía de Grey y que cuenta más de 80 testimonios.
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En uno de los fragmentos de libro, el productor ejecutivo James D. Parriott explica cómo los problemas de Dempsey con el departamento de recursos humanos llevaron finalmente a que el personaje fuera fulminado en 2015 durante el final de la temporada 11. “Hubo problemas de recursos humanos. No fue nada de tipo sexual ni mucho menos. De alguna manera (Patrick Dempsey) aterrorizaba al equipo. Algunos miembros del elenco tenían todo tipo de trastorno de estrés postraumático con él” señalaba el productor.
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Patrick, quien actualmente tiene 55 años, entró en la producción como el protagonista indiscutible de la serie y pronto se convirtió un personaje muy influyente, no solo para el público, que devoraba la serie capítulo tras capítulo sino también entre sus compañeros de rodaje. Según se desprende del libro, el atractivo Dr. Derek Shepherd no solo despertó el interés de la protagonista de la serie, la doctora Meredith Grey encarnada por Ellen Pompeo, sino el de la mayor parte del equipo, incluida la creadora de la serie, Shonda Rhimes, quien llegó a calificar al actor como “el hombre perfecto”.
Sin embargo, tantas horas de rodaje y tanto tiempo juntos acabó generando problemas, tal y como se da a entender en el libro y Patrick usó su poder y su influencia entre sus compañeros para “manipularlos”. "Tenía ese control en el set con el que sabía que podía detener la producción y asustar a la gente. La cadena y el estudio vinieron y tuvimos reuniones con ellos", recuerda Parriott. "Creo que sencillamente él había terminado con la serie. No le gustaba el inconveniente de venir todos los días y trabajar. Él y Shonda se se lanzaban al cuello el uno del otro". Esa tensión también acabó afectando a su pareja en la ficción, Ellen Pompeo, que se sintió "frustrada" y se enfadaba porque "no trabajaba tanto". “Ella era muy profesional y una gran defensora de las de que las cosas fueran justas. Simplemente no le gustó que Patrick se quejara de que "era demasiado tarde” o " de que había estado aquí demasiado tiempo" cuando ella tenía el doble de escenas en el episodio que él " señala en el libro la escritora y productora Jeannine Renshaw.
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Sin embargo, esta desidia de Dempsey y lo cansado que le parecía el rodaje no era ningún secreto ya que él mismo había hablado ùblicamene sobre ello. “Son diez meses, quince horas al día … "Nunca sabes cuál es tu horario, por lo que tu hijo te pregunta:" ¿Qué vas a hacer el lunes? " Y dices, "No sé", porque no conozco mi horario. Hacer eso durante once años es un desafío ' señalaba el actor.
Pero las quejas del equipo y los coprotagonistas continuaron acumulándose y, a medida que la relación de Dempsey con la creadora de la serie se agrió, se comenzó a pensar en su salida. "Si él no se va, me voy yo" llegó a decir Rhimes, tal y como revela una de las productoras en el libro. Sin embargo añade que nadie quería que se fuera, porque él era el espectáculo. Él y Ellen.
Según Parriott, el programa elaboró varias historias para tratar de mantener a Dempsey, incluida una en la que su personaje se quedaría en Washington, DC para poder filmar completamente separado de Pompeo y otros. Sin embargo, acabó siendo inviable y no llegó a la undécima temporada. Las últimas escenas de Patrick se filmaron en California, en un hospital a 35 kilómetros para mantener así en secreto la muerte de su personaje, hasta para el propio elenco.