El actor, que fue icono de la nouvelle vague francesa, ha fallecido este lunes 6 de septiembre, a los ochenta y ocho años, en su domicilio de París. “Estaba muy cansado desde hacía tiempo. Se ha apagado tranquilamente”, ha declarado su abogado, Michel Godes, en referencia al accidente vascular que Jean-Paul Belmondo sufrió en 2001. Aunque el actor empezó su carrera como boxeador y fue rechazado en tres ocasiones por el Conservatorio de Arte Dramático de París, logró trabajar con grandes cineastas galos, como Jean-Luc Godard, François Truffaut, Claude Chabrol o Jean-Pierre Melville.
Gran seductor, Jean-Paul se casó dos veces y tuvo cuatro hijos; uno de ellos falleció en un incendio en 1993.