Genoveva Casanova es una auténtica caja de sorpresas. No sólo es amiga de Natalie Portman, de cuya relación ya nos habló hace unos meses, sino que también ha tenido ocasión de coincidir con otras estrellas de Hollywood y hasta con miembros de las casas reales más fascinantes. “He conocido a Tom Cruise, Pierce Brosnan, Scarlett Johansson, Reese Witherspoon... Incluso al príncipe Carlos”, manifiesta a ¡HOLA!
El encuentro con el hijo de Isabel II tuvo lugar en junio de 2012 y en un escenario de lo más sorprendente: en el Castillo de Balmoral, la residencia de verano de la Familia Real Británica. Aquella cita tan memorable ya ocupó las páginas de nuestra revista, aunque es ahora cuando Genoveva nos desvela todos los detalles de su encuentro con el heredero al trono, quien terminó “sonrojado” ante ella. Así lo cuenta en ¡HOLA! en primera persona.
“Conocí al príncipe Carlos en una de las cenas que organizó Porcelanosa. Fue en el Castillo de Balmoral y yo acompañé a mi suegra. Allí también estaban Alfonso Díez, Cayetano Rivera e Isabel Preysler con sus hijas Tamara y Ana. Antes de la cena, hubo un cóctel. Ahí mi suegra me presentó a él y le dijo: “Esta es mi nuera”. Entonces, él respondió: “Ah, claro. Me ha hablado mucho de ti Cayetana. Pero eres mucho más guapa de lo que ella me había dicho”.
“Entonces, el príncipe Carlos me besó la mano y se sonrojó... Se puso todo rojo (ríe). Yo sonreí y le dije que muchas gracias. En ese momento, en el que estaba avergonzado y sonriendo, Carlos hizo el gesto de besarme la mano y nos tomaron una foto, en la que él se veía rojito. Luego, estuvimos hablando de cosas más normales junto a mi suegra y Alfonso. Recuerdo que me preguntó por mis hijos y sobre cómo era mi vida en España, porque le encantaba el clima y la comida. Camila Parker Bowles no estaba esa noche”, dice riendo.
“Fue muy lindo que el príncipe Carlos se acordara de que mi suegra le había hablado de mí y de que ella me quería mucho. Como ya se conocían mucho, de otras ocasiones, supongo que mi suegra le hablaría a él de sus hijos, sus nietos y de mí. Después de ese cóctel, se sirvió la cena, que fue muy bonita. Mi suegra se sentó en una mesa junto a él e Isabel [Preysler]. Yo estaba en la mesa de al lado, con Tamara y con Ana”.
En persona, el príncipe Carlos es encantador. Me pareció un hombre supertierno, muy cariñoso y muy lindo. Estaba muy sonriente, pero no con una sonrisa de alegría, sino de ternura... Lo recuerdo todo como un viaje muy especial, porque mi suegra es Fitz-James Stuart, que descienden de los Estuardo, los reyes de Escocia. Además, ella se alojó en Balmoral, en una casita de invitados. Aunque yo quedé en un hotel muy cerquita, también estuve en esa casita. Vi que a mi suegra le resultó un viaje muy especial, precisamente porque el palacio estaba en Escocia. Además, el príncipe Carlos ha hecho un gran esfuerzo por mantenerlo y rescatarlo. Es muy, muy bonito”.