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Este verano, los megayates más fabulosos del mundo han soltado amarras y han vuelto a navegar. Embarcaciones que son auténticas obras de arte del diseño e ingeniería y que no escatiman en lujos. Estos días, en Vigo, atracaba el ‘Azzam’, propiedad del Jeque Jalifa bin Zayed Al Nahyan. Su valor se estima en seiscientos millones de euros y, con sus 180 metros de eslora —siete cubiertas y 48 camarotes—, es el barco de recreo más largo del mundo.
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Durante mucho tiempo, el ‘Eclipse’, de Roman Abramovich, ocupó el primer puesto de los megayates más caros del mundo. Una embarcación de 170 metros y 800 millones de euros, que necesita 70 personas para navegarlo y está equipada con submarino, sistema antimisiles, láseres ‘antipaparazzi’ y todo tipo de comodidades. Claro que el magnate acaba de botar su nueva joya este mismo verano, el ‘Solaris’, de 140 metros de eslora y ocho cubiertas.
En cuestión de precio —no de tamaño—, el primer puesto del podio es para el ‘History Supreme’, un barco de 30 metros, valorado en 2,7 billones de euros, con el casco recubierto de oro, platino y diamantes. En su interior hay una estatua creada con los huesos de un tiranosaurio rex, una pared decorada con roca de meteorito y un acuario de oro.
Se suman a estos megayates el ‘Dubai’, de 163 metros; el ‘Dilibar’, de 154 metros y el único (que se sepa) con un quirófano, del multimillonario ruso Alisher Usmanov; el espectacular ‘A’, que también ha fondeado estos días en Vigo, un velero de 142 metros, ocho cubiertas, cámara de observación de cristal y tres mástiles de 91 metros, helipuerto y submarino. El ‘Octopus’, por su parte, fue encargado por el cofundador de Microsoft, Paul Allen. En sus 126 metros hay helipuerto para tres helicópteros, cancha de baloncesto, un estudio de grabación y un impresionante garaje de 36 metros de largo para siete embarcaciones.
El ‘Aviva’, además de tener pista de pádel, alberga un tríptico de Francis Bacon valorado en más de 70 millones de euros. Y por último hablamos del ‘Somnio’, que navegará en 2024 con sus 220 metros. Será un magabarco residencial para millonarios que paguen los 9,2 millones de euros que costará cada uno de sus 39 apartamentos.
