Este ha sido un verano diferente para Sara Carbonero, sobre todo porque ha sido el primero de su nueva vida sin Iker Casillas, del que se separó el marzo pasado tras más de once años juntos. Estrenando soltería, la periodista ha hecho un montón planes con sus dos hijos y con sus amigos de siempre y otros más recientes, junto a los que ha disfrutado de unas vacaciones llenas de diversión en las costas gaditanas. Unos días de descanso que le han brindado nuevos horizontes y nuevas ilusiones.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Entre estas nuevas ilusiones, hay una con nombre y apellidos: Kiki Morente. La conexión que surgió entre la guapa toledana y el hijo del recordado Enrique Morente cuando se conocieron hace tres meses se ha convertido en una amistad especial que ha dado pie a un sinfín de comentarios. Ahora, por fin hemos podido verlos juntos por primera vez, en unas imágenes que confirman la relación entre Sara y el músico granadino; sin duda, las más esperadas del verano.
Kiki, que siguiendo los pasos de su padre se dedica también a la canción flamenca, ofreció un concierto el pasado 26 de agosto en Chipiona (Cádiz), junto a su hermana Estrella Morente y otros artistas. Entre el público se encontraba Sara, que acudió acompañada de una de sus mejores amigas, la cantante Jessica Cánovas, más conocida en la escena musical como La Flaka, y por el marido de esta, el también cantante Junior. En un momento de la noche, Kiki se acercó hasta la mesa en la que estaba la presentadora y charlaron mostrando gran complicidad. Una vez terminada la actuación, Sara y Kiki abandonaron el recinto por la puerta de atrás y por separado. Por su parte, Estrella Morente salió por la puerta principal y, aunque no quiso hacer declaraciones sobre su hermano y la periodista, la cantaora se despidió de la prensa con una frase muy reveladora: “Viva la alegría y el amor”.
Al parecer, Sara está dejándose llevar, sin cerrar la puerta a nada, y esta no será la última vez que se la vea junto al hermano de Estrella Morente
Aunque, según hemos podido saber, es pronto para hablar de noviazgo, entre ellos existe mucha conexión y mucha química, “ingredientes” que han dado pie a una bonita amistad, una relación muy especial que se está afianzando, ya que, a pesar de que se están conociendo poco a poco, se entienden y lo pasan muy bien juntos. Sara ni quiere ni trata de esconderse. Acudió al concierto siendo muy consciente del revuelo mediático que se ha organizado en torno a su relación con Kiki. Al parecer, esta no va a ser la primera ni la última vez que se los vea juntos. Aunque de momento no quieren poner etiquetas a su relación, fuentes cercanas nos han comentado que se tienen mucho cariño y que el artista es alguien muy especial para la presentadora. Tras una primavera difícil en el terreno personal, Sara está dejándose llevar, viviendo cada momento sin cerrar la puerta a nada. Quién sabe si más adelante se podrá hablar de una relación sentimental en toda regla.
Durante su estancia en Cádiz, Sara y su amiga íntima Vicky Marcos, la reconocida maquilladora, visitaron el estudio de Adrián Torres, el pintor jerezano que el año pasado mantuvo un romance con Lara Álvarez. Según hemos podido saber, la relación entre la periodista y Torres es meramente profesional. Tras compartir una jornada de trabajo, fueron a tomar algo a un chiringuito de Cala Cantalejo, en las inmediaciones de Conil, junto al resto del equipo.
Durante su estancia en Cádiz, Sara también fue fotografiada con el pintor Adrián Torres, ex de Lara Álvarez, aunque, según hemos podido saber, su relación es meramente profesional
Ahora, tras este intenso verano de música y mágicos atardeceres gaditanos, llega para Sara y Kiki la prueba más difícil. La presentadora ya ha regresado a Madrid junto a sus hijos y se prepara para retomar sus compromisos profesionales. Por su parte, Kiki, que vive en Granada, también se dispone a asumir nuevos retos, como el de lanzar su primer disco. Su intención, eso sí lo podemos afirmar, es la de seguir conociéndose y lo que venga después ya se verá.