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La bella actriz Hande Erçel se encuentra en este momento en lo más alto de su carrera profesional y se ha convertido en el centro de atención en los últimos meses. Cuenta con casi 24 millones de seguidores y es, sin duda alguna, una de las intérpretes turcas que más fama ha alcanzado, no solo en su país sino a nivel mundial. La protagonista de Love is in the air visitó hace unas semanas el programa de la televisión turca Esta noche de Ibrahim Selin, donde se sinceró y habló sobre temas que abarcaron desde su juventud y adolescencia, hasta su actual fama. En la citada entrevista mostró su lado más sensible y también dejó reflejada la fortaleza de su carácter y de su forma de pensar.
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Llegó a Estambul hace 10 años proveniente de Balikesir, pasó su infancia en esa pequeña ciudad donde todos se conocían y donde la actriz se sentía libre, un lugar que, de alguna manera, se convirtió en su pequeño mundo. Creció feliz jugando en la calle, ya que andaba por el barrio con seguridad y autonomía. Esa libertad la llevó a ser perseverante y a no rendirse ante los obstáculos de la vida. Con esa carita angelical nadie se imagina que de niña nunca fue tranquila, que hablaba mucho y era muy traviesa. Ya en la adolescencia se convirtió en un quebradero de cabeza para su padre. Hande y su hermana Gamze se llevan solo un año por lo que siempre las trataron como si fueran gemelas, las vestían igual y les cortaban el pelo de la misma forma.
De niñas, las dos hermanas ya decían que querían ser actrices y les gustaba jugar a ponerse los tacones de su madre y colocarse una toalla en el pelo a modo de melena. En la adolescencia fueron definiendo su personalidad y, aunque como todos los hermanos tuvieron sus diferencias, ahora Gamze es uno de sus grandes apoyos, junto a su sobrina Mavi, su tesoro más preciado: “Ser tía es el mejor sentimiento del mundo” afirmó la intérprete. Está tan unida a su hermana que siente como si estuvieran pegadas. La actriz es una mujer familiar a la que le gusta compartir con los suyos muchos momentos y a la que en un futuro le encantaría ser madre. Tiene un gran talento para el arte por lo que, de no haber sido actriz, sería pintora, para lo que ha tomado clases.
La guapa intérprete cuenta con un íntimo grupo de amigos que le dicen las cosas sin miedo a que se enfade y que le hacen de 'espías' para saber qué se dice de ella en las redes. Aunque tiene la lengua muy afilada y no filtra lo que dice cuando se enfadada, es muy justa en sus juicios y respeta los puntos de vista de los demás. Se define como una mujer precavida y vergonzosa por lo que, para lanzarse a hablar sobre cualquier tema, necesita conocerlo. Si no se siente segura, se retira humildemente con un “no sé”, ya que considera que son unas palabras con un gran valor. Como curiosidad confesó que no le gusta ir a un sitio y que la comida salga tarde o algo esté mal y confirmó que, como casi todos, de niña tuvo piojos en alguna ocasión.
Es una mujer perseverante, un rasgo que le ha ayudado mucho en los malos momentos por los que ha pasado en su carrera y que la ha hecho perseguir y nunca renunciar a su mayor sueño: ser actriz. Al llegar a Estambul para ir a la universidad le picó el gusanillo de la interpretación y confiesa que le debe mucho a la actriz Hülya Duyar (Mi hogar, mi destino) ya que, en sus inicios, la ayudó mucho presentándole a mucha gente del medio y llevándola a la agencia donde comenzó con sus ensayos y audiciones. Le gusta compartir con sus seguidores los momentos que vive y usa sus perfiles con sinceridad para poder estar en contacto con sus fans y con el público en general.
Sobre su pareja, Kerem Bürsin, habló poco. La actriz contó divertida que en las grabaciones de Love is in the air trataban de asustarse porque tenían una apuesta para ver quien lo conseguía. Él trató de hacerlo en diferentes ocasiones, pero sin éxito. Hande significa 'sonrisa', un gesto que implica confianza, abre puertas y puede hacer cambiar el rumbo de las cosas. Afirmó que su lema es: “No importa lo que pase, encuentra siempre un motivo para sonreír”, ya que es de las que ve el lado positivo de las cosas y trata de sacar lo bueno de cada situación. Además, es de las que se ríe sola y sin sentido y también confesó hablar sola delante del espejo porque es el único momento en el que se encuentra con ella misma.
Hande reconoció ser supersticiosa: “Lo hago todo tres veces. Hablar, pedir un deseo, mover los dedos, todo lo repito ese número de veces, tengo que triangular las cosas". Preguntada por Selin sobre si alguna vez había tenido que decir una mentira para ocultar otra, la protagonista de Hayat: amor sin palabras reveló que sí ha tenido que hacerlo y, entre risas, confesó que no podía contar más sobre el tema porque los interesados seguían pensando que dijo la verdad. La guapísima intérprete explicó que debajo de su aspecto dulce se oculta un león, que es paciente pero cuando llega al límite estalla y no hay quien la pare. Una cercana entrevista en la que pudimos descubrir aspectos de la famosa actriz desconocidos hasta ahora.