"Es la mejor abuela del mundo, la que más nos ha podido querer y la alegría de la familia". Así hablaba Tamara Falcó de Beatriz Arrastia en 2019, cuando acudió al plató de Volverte a ver, de Telecinco, para sorprenderla. La marquesa de Griñón no fue sola al programa de Telecinco. Lo hizo junto a su hermano Julio José Iglesias. Y los dos lloraron de emoción al escuchar las palabras de su querida beba, como la llamaban cariñosamente. "Tamara es una mujer tan estupenda", dijo Beatriz Arrastia. "Y Julio siempre es alegre, es un hombre que dice las cosas con sus ojos, si quiere algo, si no quiere algo... nos entendemos muchísimo", añadió. Ahora, tanto Tamara como Julio José tendrán que afrontar su pérdida, al igual que el resto de la familia.
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- Con este enorme cariño hablaba Beatriz Arrastia, madre de Isabel Preysler, de sus hijos y nietos
La marquesa de Griñón, de 39 años, ha despedido a su abuela en el domicilio familiar de Puerta de Hierro, Madrid. En estas imágenes la vemos saliendo de la residencia de Isabel Preysler para acudir al Club Puerta de Hierro. Allí pasó unos minutos y rápidamente regreso al lado de su madre para reconfortarla en estos momentos tan tristes. Según contó el padre Ángel, el encargado de oficiar un breve respondo por Beatriz Arrastia en la intimidad de su hogar, Isabel Preysler se encuentra "dolida y triste", pero también es consciente de que su madre "se ha ido con paz".
Beatriz Arrastia ha sido un referente para todos sus nietos, en especial, para Tamara. "Vino a casa cuando yo tenía 15 años, iba a misa todos los días, y nosotros nos reíamos de ella porque entonces éramos ateos...y ahora es un ejemplo para mí...es la inspiradora de mi fe y mi conversión", dijo la aristócrata en el programa de Carlos Sobera. "Nunca dio su brazo a torcer y gracias a sus rezos consiguió que yo me convirtiera. Cuando le dije que me quería confesar, mi abuela tardó 20 minutos en encontrar un sacerdote. No iba a perder la oportunidad de salvarme", contó Tamara muy divertida, al tiempo que revelaba que su abuela rezaba en inglés (hablaba también español y tagalo).
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La madre de Isabel Preysler constató después las palabras de su nieta. "Cuando me instalé en casa de mi hija (Isabel Preysler) yo iba cada día a misa. Mi nieta (Tamara Falcó) era muy joven, pero su padre (Carlos Falcó) me dio las gracias por las cosas que le estaba enseñando y eso me llegó al alma. Yo le dije, no, Carlos, no he hecho nada, ha sido ella la que ha querido cambiar", explicó.
Tanto Tamara como Julio José destacaron la fortaleza de su abuela. "Es una mujer muy fuerte. Vivió la Segunda Guerra Mundial, ahí fue cuando conoció a mi abuelo. Ella había escondido como una pequeña radio cuando vinieron los japoneses a Filipinas, cuando estaban totalmente prohibidas las radios... ha vivido una vida muy llena. En aquella época era jovencísima, todavía no había nacido su primer hijo, se acababa de casar, y yo creo que mi abuela se casó con 18 o 19 años", señaló la aristócrata.
El pasado 28 de marzo, Tamara felicitó a su abuela por su 98 cumpleaños con esta foto tan especial en la que aparece, de joven, con su marido, Carlos Preysler Pérez de Tagle, con el que tuvo seis hijos, Victoria, Enrique, Isabel, Carlos y los mellizos Joaquín y Beatriz. "Happy birthday, Beba. Sigue brillando de esa manera tan especial durante muchos años. Te queremos", escribió la aristócrata.
Beatriz Arrastia Reinares nació el 28 de marzo de 1923 en el seno de una de las familias más ricas de la provincia filipina de Pampanga. Recibió una educación muy elitista y tanto ella como sus hermanas siempre destacaron por su gran belleza. De hecho, según contó su nieta Tamara en Volverte a ver, Isabel Preysler había heredado "ese look exótico". A pesar de su privilegiada condición, ya de adulta, Beatriz Arrastia tuvo que enfrentarse a los estragos generados por la Segunda Guerra Mundial, así como a la muerte de tres de sus seis hijos (Enrique, Beatriz y Carlos).
En su primera y única entrevista, Beatriz Arrastia declaró que tenía "unos nietos maravillosos" y que su hija, Isabel Preysler, "es maravillosa, vale su peso en oro". Además, en aquella intervención Tamara Falcó y Julio José Iglesias desvelaron que a su querida beba le encantaba jugar al dominó, salir de merienda-cena con sus amigas y comer churros. "Se hincha a churros", contó la aristócrata tan espontánea como siempre. "La abuela tiene un apetito impresionante", añadió. "Y bebe Coca-Cola todos los días", puntualizó entre risas Julio José.