Hace 14 años que el actor Owen Wilson intentó suicidarse tras un largo periodo de depresión, pero nunca ha respondido ninguna pregunta que tuviera que ver con uno de los peores momentos de toda su carrera. Desde entonces apenas ha concedido entrevistas y se ido cada vez que un periodista ha intentado conocer cualquier cosa de su vida personal y que no estuviera relacionada con el filme que estuviera promocionando. Pero ahora, el intérprete de Medianoche en París ha confesado que el primer pensamiento que tuvo cercano a la muerte fue con tan solo once años y que recuerda perfectamente el momento en el que le dijo a su padre que "le preocupaba morir". Y a pesar de que el estadounidense no ha querido explicar el motivo por el que quiso quitarse la vida ni cómo fue ese momento, no ha dudado en expresar quién estuvo a su lado para ayudarle. "Andrew (su hermano) se quedó en su casa tras el suceso. Después de eso fue él quien lo ayudó levantándose cada mañana", relatan en la entrevista concedida a Esquire.
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Después del intento de suicidio, al hermano mayor de los Wilson se le ocurrió que lo mejor para que Owen era "escribir pequeños horarios para cada día" y que así el actor tuviera la impresión que la vida era más fácil y manejable al principio para que después pudiera ir a mejor. El intérprete de Noche en el museo ha ido resumiendo algunos momentos de su vida personal a través del cine y este oscuro suceso ha querido explicarlo a través de Tom Hardy y El renacido: "La vida es como si estuviera interpretada por este personaje, un tipo espeluznante que intenta matarte y que incluso cuando crees que tienes ventaja va a estar ahí susurrando: 'Esto no va a traer a tu hijo, a tu padre o cualquier momento de tu pasado de vuelta. Y cuando la vida está siendo interpretada por ese tipo, solo tienes que aguantar y esperar a que pase", ha dicho el actor.
No se sabe muy bien cuáles fueron los motivos, pero muchos aseguran que la ruptura con Kate Hudson fue lo que le condujo a su profunda depresión. Su hermano Luke es quien lo encontró en su casa y llamó al 911 para que fuera trasladado de urgencia al hospital, donde afortunadamente pudieron salvarle. Además, si algo se decía el pequeño de los Wilson sobre el actor es que la vida de su hermano no iba bien. Fue más que una simple corazonada porque sabía que intentaba superar la ruptura de su relación recurriendo a sustancias nocivas de una manera descontrolada, lo que supuestamente también había precipitado su noviazgo al fracaso.
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El día que todo ocurrió, Luke llamó a su hermano preocupado y cuando no obtuvo respuesta cogió su coche por las calles de Los Ángeles para ir rápidamente en la búsqueda de Owen, que se encontraba en su residencia de Santa Mónica. Ni siquiera intentó llamar al timbre, entró directamente y vio como el actor se había cortado las venas y había ingerido un gran número de pastillas, tal y como revelan en Star y National Enquirer. Por suerte llegó a tiempo y aquellos tiempos quedaron como un recuerdo que el intérprte intenta olvidar.