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José Luis Santos Yanes, el hijo mayor de la prestigiosa joyera Cristina Yanes y el empresario José Luis Santos, y Fátima Úrculo de Miguel, su novia desde hace años, contrajeron matrimonio el pasado sábado 17 de julio en el palacio de Elsedo, en la localidad cántabra de Pámanes.
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La construcción, de principios del siglo XVIII, es propiedad de los Santos. El abuelo paterno del novio restauró este palacio para habilitarlo también como un museo de arte moderno, en el que se pueden contemplar obras de diferentes artistas contemporáneos.
Una princesa medieval
Antes de las doce del mediodía, José Luis, vestido con chaqué clásico y chaleco blanco de piqué, llegó a la capilla del brazo de su madre, Cristina, una deslumbrante madrina con un traje largo de color rosa palo de Hervé Léger, con escote barco. Minutos después lo hizo la novia, que, con un look muy acorde con el entorno, parecía una princesa medieval. Fátima llevó un traje de raso, obra de From Lista With Love, de corte clásico, en línea recta, con escote cuadrado y hombros estructurados de los que partían las largas mangas que hacían las veces de capa y que más tarde se quitó para dejar el vestido sin mangas al descubierto.
Una joya de familia
En lugar de velo, la novia lució la espectacular tiara Alhambra de oro de ley perteneciente a la colección privada de las joyas de la familia Yanes, al igual que ya hizo su suegra, Cristina, el día de su boda, en septiembre de 1988.
Tras la ceremonia, a cargo del diácono Esteban Bernárdez Yanes, primo del novio, que oficiaba su primera boda desde que se ordenó sacerdote, los recién casados y sus invitados se trasladaron a los jardines del palacio, donde tuvo lugar la celebración al aire libre.
Entre los asistentes, además de las familias de ambos, destacaron por su elegancia algunas de las mejores amigas de la familia, como Paloma Cuevas, Patricia Rato, que acudió acompañada de Javier Moro, y Gema Ruiz, junto a su marido, Juan Díaz, con el que acaba de celebrar su noveno aniversario de boda.
Paloma Cuevas: ‘Un fin de semana inolvidable’
Paloma, en su primera aparición después de firmar la semana pasada el acuerdo de divorcio con Enrique Ponce, tal y como adelantó ¡HOLA!, estaba radiante con un vestido azul turquesa con cuello halter y corte en ‘V’, que resaltaba su esbelta silueta. La empresaria completó su look con una sofisticada pamela en color crema con una rosa, realizada por la sombrerera sevillana Reyes Hellín.
Paloma, que disfrutó de un fin de semana “inolvidable”, como ella misma expresó, dedicó unas bonitas palabras a los padres del novio: “¡Maravillosa boda, compadres!”, publicó junto a las imágenes del enlace que compartió con sus seguidores. En otra de la fotografías, aparece con Cristina Yanes, a la que está muy unida, junto al mensaje: “Bellezón de madrina. Te adoro”.
Aunque todos los asistentes llegaron a los jardines caminando desde la capilla, los novios lo hicieron a bordo de un MG clásico descapotable, propiedad del padre de la novia. Una llegada triunfal que algunos de los invitados se apresuraron a inmortalizar con sus móviles. Entre ellas, Marta y Lucía Pombo, hermanas de la influencer María Pombo, que estaban encantadas de asistir a la boda, ya que forman parte de su pandilla de amigos de toda la vida y conocen bien Santander, donde veranean desde pequeñas.
Conscientes de la delicada situación sanitaria, los novios requirieron a la mayoría de los asistentes la realización previa de un test de antígenos, y toda la celebración tuvo lugar al aire libre, en los jardines del palacio, aprovechando el tiempo espléndido que acompañó todo el fin de semana en Cantabria.