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Tras año y medio largo de restricciones sanitarias, París recupera poco a poco el pulso y la vuelta a la ‘normalidad’. Uno de los eventos más esperados era la Semana de la Alta Costura otoño-invierno 2022, que, por primera vez desde que estalló la pandemia, se celebró con desfiles presenciales.
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Christian Dior fue el encargado de inaugurar el calendario en el Museo Rodin. Junto a actrices como Jennifer Lawrence, Jessica Chastain y Monica Bellucci y modelos como Suki Waterhouse y Cara Delevingne —con el look más arriesgado—, en el front row se encontraban también nombres de la realeza, como la hija menor de Carolina de Mónaco, la princesa Alexandra de Hannover, y la hija de la infanta Elena, Victoria. De la mano de su padre, Jaime de Marichalar, la sobrina de Felipe VI acudía por primera vez a un desfile en la capital francesa y no podía ocultar lo ilusionada que estaba.
La otra gran cita con público —muchas de las casas de moda tuvieron que recurrir de nuevo a los formatos digitales— fue la de Chanel, que presentó su colección en el Palais Galliera. Alexandra de Hannover no faltó al desfile de la maison que adora su madre y de la que su hermana, Carlota, es embajadora, y, en primera fila, coincidió con la suegra de ésta última, Carole Bouquet.
Dentro de la Semana de la Alta Costura, Louis Vuitton ofreció una cena para dar a conocer los nuevos perfumes que han creado en colaboración con el arquitecto Frank Gehry. Entre los asistentes, dos parejas con estrella: Katy Perry y Orlando Bloom y Sophie Turner junto a su marido, Joe Jonas.