Continúa en nuestro país la fiebre por las series turcas y este lunes por la noche asistimos en Nova a un nuevo estreno: Paramparça: vidas cruzadas. Una ficción que, como está ocurriendo con todas las producciones otomanas que llegan a nuestra televisión, seguro que logra enganchar al espectador con su historia. Se trata de un drama emocional que recorre la vida de dos familias que viven en mundos totalmente opuestos y cuyo destino ha sido alterado: Las hijas biológicas de ambas fueron intercambiadas al nacer y estas harán lo imposible por recuperarlas. La telenovela está protagonizada por Erkan Petekkaya, Nürgul Yesilçay, Ebru Özkan, Leyla Tanlar y la estrella juvenil turca Alina Boz, a la que conocimos en nuestro país gracias a No sueltes mi mano. La actriz, que es una celebridad en Turquía, aún es una gran desconocida para la mayor parte del público español, por lo que vamos a revelar algunos aspectos de su vida y los secretos por los que ha enamorado a miles de espectadores.
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Sus orígenes y su formación
Su padre proviene de una familia turca con ascendencia búlgara y su madre es rusa; de ahí su blanca tez y sus impresionantes ojos azules. Una mezcla que ha llamado mucho la atención de los productores y de la audiencia en general. Alina nació en Rusia, 14 de junio de 1988, y vivió en ese país hasta los siete años, momento en el que, debido al trabajo de su padre, se trasladaron a Estambul donde comenzó sus estudios de primaria. A los nueve años comenzó a estudiar teatro y a bailar. En la escuela secundaria estudió aviación comercial y, al graduarse, siguió con sus estudios de teatro en la Universidad Kadir Has.
El talento y la belleza le vienen de familia
Su madre, Olga Boz, es una talentosa fotógrafa rusa especializada en retratos, cuyas obras se caracterizan por tener cierto halo mágico y de cuento. También hemos visto cómo ejerce de orgullosa mamá en las redes sociales, donde podemos encontrar diferentes instantáneas de la actriz y de cómo les gusta compartir tiempo juntas, mostrando lo unidas que están madre e hija. Así, en la primera foto que Alina publicó junto a Olga para felicitarle en el Día de la madre, esta llamó la atención de sus fans por su juventud: “Es como una hermana mayor”, escribían sus incondicionales. Ambas tienen en común su gran belleza, la melena rubia y esos inmensos ojos azules que vuelven locos a sus miles de seguidores.
Sus comienzos en la interpretación
El debut televisivo de Alina fue en la serie Cesur Hemşire. Pero será el 1 de diciembre de 2014 cuando empiece a ser conocida por su trabajo en Paramparça: vidas cruzadas, donde interpreta a Hazal Gürpinar: una mujer egoísta, caprichosa, ambiciosa y muy materialista, que siempre pone por delante el dinero. Después vendría su primer personaje protagonista con Azra, en No sueltes mi mano (Elimi Birakma); donde se mete en la piel de una joven que tiene una vida perfecta hasta el día en que su padre muere en una misteriosa explosión. Acto seguido, su madrastra la deja sin hogar ni dinero junto a su hermano autista. Sería esta una interpretación que acabaría por consagrarla como la gran estrella que es hoy a nivel internacional.
Las firmas se la rifan
Alina se ha convertido en uno de los rostros más populares de Turquía. Cuenta con una legión de casi cuatro millones de seguidores en Instragram, algo que no pasa desapercibido para las marcas más importantes. Eso, unido a su imagen fresca y moderna, hace que las firmas se ‘peleen’ porque muestre sus productos. La intérprete ha sido protagonista de muchos anuncios y actualmente podemos verla publicitando una firma de jabones turcos. También ha sido imagen de Adidas, Samsung Turquía, Pantene y de la firma española Stradivarius, entre otras, además de protagonizar multitud de portadas y reportajes de moda.
Siempre en forma
Alina se entrena duro a diario en el gimnasio, manteniéndose en forma con la ayuda de su entrenador personal, Kerim Savassari, quién la somete a largas y duras sesiones de entrenamiento. Pesas, sentadillas y tablas de ejercicios son algunas de sus rutinas habituales y uno de los secretos de su esbelta figura. No sabemos si también juega al fútbol, pero sí que disfruta al máximo con un buen partido del deporte rey, sobre todo, si uno de los equipos que están sobre el césped es el suyo: el Besiktas turco.
Los viajes, la playa y el surf son algunas de sus pasiones
Cuando no está trabajando, la intérprete aprovecha siempre que puede para regresar a sus orígenes, a su Rusia natal, donde se siente en casa recorriendo las calles de Moscú. Pero sus inquietudes viajeras van más allá y también le gusta poner rumbo a nuevos destinos, viajando a ciudades como Londres o descubriendo nuevos rincones de Turquía como la Biblioteca de Celso, en Éfeso. Es una amante de la playa, un lugar que le ayuda a desconectar porque allí se siente libre y feliz y donde disfruta surcando los mares sobre una tabla de surf, otra de sus pasiones.
Sus proyectos actuales
En 2020 protagonizó la serie juvenil Love 101 (Ask 101) para Netflix, interpretando el papel de Eda, donde también podemos ver a Kaan Urgancıoğlu, un viejo conocido de los seguidores de las telenovelas turcas por ser el malvado Emir de Kara Sevda. Muy pronto verá la luz en esta plataforma digital la segunda temporada llamada Love 102. El pasado 8 de julio terminó de grabar Maraşlı, una novela romántica sobre un guardaespaldas con una hija enferma. Alina comparte protagonismo en este proyecto con Burak Deniz, al que conocimos como el galán de Hayat: amor sin palabras y al que, actualmente, podemos ver en Nuestra historia. La química de la pareja es tal en la ficción que, en ocasiones, han llegado a desbancar a la formada Hande Erçel y Kerem Bürsin en Love in sin the air en búsquedas y comentarios. Por algo Maraşlı se ha convertido en una de las producciones más exitosas de la programación actual en Turquía.
Sus amores
Alina siempre se ha mostrado muy discreta con su vida personal salvaguardando su intimidad. Muchos la relacionaron con el actor Alp Navruz, su compañero en No sueltes mi mano, por la complicidad que desprendían en pantalla, pero nunca hubo confirmación por ninguna de las dos partes. A día de hoy no se le conoce pareja oficial y su único amor declarado es por los animales. Sus redes están llenas de fotografías con sus mascotas: caballos, perros, gatos… con los que la hemos visto pasear por la playa y hasta acompañarla en algunos de sus viajes.