Hace unos días Georgina Rodríguez y Cristiano Ronaldo comenzaban oficialmente sus vacaciones familiares en Mallorca. Al igual que el verano pasado, la pareja ha apostado por surcar las aguas en un espectacular yate en el que desconectar, reponer fuerzas y refrescarse en alta mar. Además, con el mágico telón de fondo que supone estar solos en medio del océano, la modelo ha protagonizado un espectacular posado para el que se convierte en toda una sirena. Gio, como la llaman cariñosamente en su círculo íntimo, ha subido la temperatura con una sensual fotografía en blanco y negro en la que aparece tumbada en la cubierta de la embarcación, donde hay una zona con colchonetas destinada a tomar el sol y relajarse con la brisa. "Sirena varada", ha escrito junto a la imagen con la que ha conquistado a sus seguidores y amigos.
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Este fin de semana la modelo jacetense ha vuelto a disfrutar de estas jornadas en alta mar después de hacer un alto para vivir en primera persona la 74ª edición del festival de Cannes. Tras posar en la alfombra roja de esta importante cita cinematográfica y conocer nuevos rincones de la ciudad francesa, Georgina ha retomado sus días de descanso y vive con intensidad cada uno de los minutos de esta nueva rutina veraniega. La pareja de Cristiano Ronaldo disfruta bronceando su cuerpo, bañándose y haciendo planes sencillos como ver la televisión con el futbolista a la vez que observan desde la cama de su embarcación las irrepetibles puestas de sol. A pesar de lo cotodiano de estos gestos, ellos le dan mucho valor puesto que sus respectivos compromisos profesionales les obligan a desplazarse con frecuencia y a tener que estar lejos de su familia.
En estos días de asueto la pareja también aprovecha para pasar tiempo con sus íntimos y disfrutar lo máximo posible de sus cuatro niños sin estar pendientes del reloj. Cristiano Jr, Eva, Mateo y Alana Martina son los grandes protagonistas de su día a día. Además, aunque están creciendo rodeados de comodidades, ambos se esfuerzan para que los menores tengan siempre presentes los orígenes humildes de sus papás y de esta manera puedan valorar todo lo que les rodea. "Hemos trabajado muy duro para conseguir lo que tenemos y esa es la enseñanza que queremos transmitir a nuestros hijos", aseguraba ella en Grazia, donde reconocía que les han enseñado a no dar nada por hecho, a ser humildes y no perder el contacto con la realidad. "El sacrificio, la disciplina, el sentido de responsabilidad, los sueños, la perseverancia y la gratitud son valores que queremos transmitirles cada día”, añadía.
Un flechazo que se ha convertido en familia numerosa
Una vez que finalicen las semanas de descanso, se espera que Cristiano y Georgina regresen a Italia, donde tienen fijada su residencia desde verano de 2018, cuando se despidió del Real Madrid y de su vida en la capital al fichar como delantero de la Juventus de Turin. Para iniciar esta nueva etapa contó con el apoyo incondicional de su pareja, con la que sale desde hace cinco años, cuando se conocieron en la boutique de moda en la que ella trabajaba en Madrid y surgió el flechazo según nos contaba en las páginas de ¡HOLA!. Tal y como explicaba la modelo, que prepara con Netflix un reality de su vida, el futbolista portugués con el que coincidió más tarde en una fiesta la conquistó solo con una mirada y la forma en la que la trata hizo el resto.
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