Están siendo unas vacaciones muy diferentes para Sara Carbonero . En primer lugar, porque está pasando su primer verano sin Iker Casillas, de quien se separó en marzo tras once años de amor. Pero también porque la periodista parece estar ilusionada con Kiki Morente, hijo del recordado cantaor Enrique Morente. Mientras que la revista Semana —medio que ha desvelado la relación— habla ya de un noviazgo de dos meses, el círculo de Sara prefiere mostrarse cauto y referirse como “una bonita amistad”. De hecho, no hay ninguna prueba gráfica de que la pareja exista ni tampoco confirmación alguna.
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De lo que no parece haber dudas es que hay química entre ambos. De hecho, Kiki ya presentó a la periodista a su familia a mediados de junio, en el concierto que el artista flamenco ofreció con su hermana Estrella Morente en Madrid. Toda una sorpresa para su familia, puesto que, tal y como publican varios medios, él nunca había presentado ninguna mujer de manera tan formal en sus treinta y un años de vida. A pesar de todo, tanto la abuela de Kiki, Rosario Muñoz, de noventa y un años, como su madre, la bailaora Aurora Carbonell, viuda de Enrique Morente, quedaron encantadas con la presentadora.
Según La Razón, Kiki y Sara se conocieron a través de la maquilladora Vicky Martos, que es pareja de Pedro Barbarre, percusionista y primo del cantaor. Otros medios sostienen que ambos se han vuelto a ver estos días en Oporto, donde la periodista compartió cinco años con Iker y donde ha disfrutado de unas vacaciones con sus dos hijos, los pequeños Martín y Lucas . De momento, no hay pruebas gráficas de este rumoreado encuentro de Sara y Kiki en el país vecino. Eso sí, como siempre ocurre, el tiempo será el encargado de despejar todas las incógnitas en esta relación.