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Britney Spears ha vivido en las últimas semanas una sucesión de acontecimientos inesperados que han puesto en jaque el caso legal que la enfrenta a su padre, aunque puede que ahora las cosas empiecen a cambiar. La artista está decidida a librarse de la tutela que Jamie Spears ejerce sobre ella desde hace trece años y en este camino contaba con un abogado defensor, Samuel Ingham III, que fue designado por el tribunal en 2008 para actuar en su nombre mientras estuviera bajo tutela. Hace solo unos días, Ingham presentó su renuncia ante el juez, aunque no ha sido una mala noticia para Britney, que llevaba un tiempo pidiendo que la dejaran elegir a su defensor. No ha tardado en hacerlo contratando al abogado Mathew Rosengart, que ya la ha representado en una nueva y desgarradora comparecencia ante el juez. La artista volvió a hablar por teléfono con la magistrada Brenda Penny el 14 de julio para señalar que le gustaría presentar cargos contra su padre "por haber abusado de su poder como tutor", tal y como ha informado la CNN. "Quiero presentar cargos contra mi padre. Quiero que le investiguen" explicó en este nuevo testimonio. Detalló que la tutoría legal a la que está sometida es "una crueldad" y dijo que entre las limitaciones que le imponían estaban una estricta dieta y un número exagerado de horas de trabajo.
Revés judicial para Britney Spears: su padre seguirá gestionando su fortuna
No le permitían por ejemplo tomar café. "Si eso no es abuso, no sé lo que es" añadió. La NBC ha contado que Britney se confesó "asustada" y dijo que la tutoría legal "había permitido a su padre arruinar su vida". Explicó además que la habían obigado a trabajar 70 horas a la semana. "Su objetivo era volverme loca pero no lo estoy. Eso no está bien". En esta primera defensa de su nueva clienta, Mathew Rosengart instó a Jamie Spears a renunciar voluntariamente al cargo de tutor. "Es lo mejor", dijo el letrado fuera de la sala. "Actuaremos rápida y firmemente para eliminarlo. La pregunta sigue siendo, ¿por qué está involucrado? Debería renunciar voluntariamente porque eso es lo mejor para el pupilo" señaló. La representante legal de Jamie dijo que él no se irá y Rosengart ha declarado que estudiaráa fondo lo que ha ocurrido con la intérprete en la última década, pues él confía en su testimonio.
Sam Ingham fue muy criticado
El papel que ejerció Samuel Ingham como defensor de Spears fue muy cuestionado en diversas ocasiones a lo largo de los años, ya que se dijo que parecía más afín a los intereses del padre de la cantante, Jamie Spears, que a ella misma. La propia Britney manifestó en la vista del pasado 23 de junio que Ingham había intentado disuadirla de testificar ante el juez y aseguró que nunca fue consciente de que podía solicitar de manera oficial el fin de la tutela paterna. Reiteró además que quería escoger a su propio abogado, algo que por fin se le ha permitido.
Unas palabras tras las que Ingham, según declararon fuentes cercanas aTMZ, se confesó disgustado, asegurando que sí había dejado claro a la cantante los pasos que podía dar con respecto a su situación personal. Mathew Rosengart, nuevo abogado de la cantante, es un nombre muy conocido en Hollywood pues ha trabajado para Ben Affleck, Steven Spielberg y Sean Penn, entre otras personalidades. Algunas fuentes han declarado que a Mathew le parece muy creíble la historia que cuenta la artista y que luchará por liberarla de la tutela de su padre. A la renuncia de Ingham, se ha sumado estos días la del manager de Spears Larry Rudolph (no tiene contacto con la artista desde hace más de dos años) y la de Bessemer Trust, la gestora de patrimonio que manejaba sus finanzas con su padre Jamie -este último ha sido confirmado además por el tribunal, al menos de momento, como encargado único de manejar su fortuna-.
