Una nueva etapa comienza para Ernesto de Hannover. En marzo fue condenado a diez meses de prisión en régimen de libertad condicional por un tribunal austriaco, que además le prohíbe beber alcohol durante ese período de tiempo y le exigen abandonar temporalmente su residencia en Austria. Precisamente en este país, el Príncipe ha dado un paso más al ingresar por voluntad propia en un prestigioso centro de bienestar en el que dejar atrás una etapa marcada por la polémica, los excesos y los problemas familiares. Según adelanta Bunte, el todavía marido de Carolina de Mónaco se encuentra desde junio en una prestigiosa clínica llamada Vivamayr que tiene sedes en diferentes puntos de Europa y por la que han pasado otros rostros conocidos como Kate Moss, los Rolling Stones, Suki Waterhouse, Elizabeth Hurley, Karlie Kloss o Rebel Wilson, entre otros.
-Ernesto de Hannover y su heredero, cada vez más alejados en su eterno conflicto familiar
-¿Por qué no se han divorciado Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover? Ella tiene un motivo de peso
El jefe de la casa Güelfa, de 67 años, ha apostado por la clínica austriaca de Altaussee, que está ubicada a aproximadamente una hora de Salzburgo y tres de otras ciudades destacadas como Viena o Munich. Tal y como indica la propia web del centro, que está rodeado de un idílico paisaje en el que hay montañas y lagos y dirigido por Dieter Resch, se ayuda a encontrar el camino hacia la salud a largo plazo y una nueva calidad de vida. Para lograrlo se ofrecen ocho programas que se adaptan a las necesidades de cada uno y que se centran en optimizar el peso, fortalecer el sistema inmune, desintoxicación y reducción del estrés... Además, informan de que a lo largo del proceso de la terapia, diariamente un médico habla con los pacientes para asegurarse de que se mantienen por el camino correcto para conseguir su objetivo.
Durante su estancia, el Príncipe puede elegir alojarse en habitaciones individuales y compartidas, suites, áticos y apartamentos, variando de esta forma los precios desde 300 a 580 euros por noche. El coste total por semana, incluyendo los tratamientos, es de unos 5000 euros. El día a día de este exclusivo centro es estricto tanto en horarios como en actividades y alimentación. La jornada para Ernesto de Hannover comienza a las 6.30 de la mañana para iniciar su terapia, que puede combinar con tratamientos de bienestar y belleza. No en vano, hay una piscina de agua salada, sauna... Un chef se encarga de preparar el menú basándose en la medicina Mayr y usando productos orgánicos, locales y de temporada. El padre de Alejandra de Hannover tiene también a su disposición un bar de cócteles donde solo se sirven infusiones y agua.
Sus primeras palabras en la clínica
En medio de esta etapa de desconexión, Ernesto de Hannover ha recibido durante su estancia en esta clínica a la periodista de RTL Natascha Großer, a la que ha concedido una entrevista y con la que ha recorrido las instalaciones muy sonriente y animado. En este encuentro ha explicado que uno de sus objetivos es ganar peso puesto que el estrés de los últimos meses le ha ha hecho bajar en ocasiones hasta 43 kilos, una cifra muy baja teniendo en cuenta que mide 1,82 metros. "Estoy más delgado que nadie, pero tengo que construir músculo", sostiene. Así, ha contado que él se da el capricho de desayunar en una de las mejores pastelerías de la zona y cuenta con la autorización del doctor para hacerlo. Con un aspecto visiblemente mejorado ya que en estos momentos pesa 60 kilos, se ha mostrado muy contento con su experiencia en este centro que define como maravilloso, con buen personal y donde está conociendo a gente agradable.