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Cincuenta años no se cumplen todos los días, es una cifra muy señalada, y por eso Paulina Rubio ha querido celebrarlo por todo lo alto y en buena compañía en una fiesta, a la que ¡HOLA! ha entrado en exclusiva, que tuvo lugar en el Faena Hotel, de Miami Beach. A su lado no faltaron su madre, Susana Dosamantes; su hermano, Enrique, y sus dos hijos, los pequeños Andrea Nicolás y Eros, quien la felicitó micrófono en mano: “Happy birthday, my rockstar”. Su madre también le dedicó unas bonitas palabras, describiéndola como una mujer “trabajadora, inteligente y tenaz”.
Además, estuvo rodeada de grandes amigos, como el empresario Eugenio López, el presentador Óscar Madrazo, el diseñador Michael Costello, Beatriz Pasquel, Jeanette Longoria, el productor Pedro Torres, Claudia Zacarias y Trista Rullan, entre otros.
© ©Allí no solo brindó por su entrada en una nueva década, sino también por todos los éxitos que ha logrado a lo largo de su carrera y por los que están por venir, porque tiene energía y ganas para largo y llega a los cincuenta tan fabulosa como siempre, como si los años no hubieran pasado por ella. Ella sigue y seguirá siendo “la chica dorada”, con una sólida trayectoria, de casi cuarenta años a sus espaldas, con la que se ha convertido en todo un icono de la música en español. La intérprete mexicana ha sabido reinventarse con el paso de los años, pues no se ha limitado al pop, sino que ha traspasado los géneros, haciendo exitosos duetos con ritmos tan versátiles como el reguetón y la cumbia.
“Lo que más disfruté es ver a mis hijos bailar con mi madre. Estoy agradecida por verlos con salud y por tener un público y unos amigos que me aman tanto como los amo yo”
Como la música en su vida, música y muchos bailes no han faltado en esta celebración, además de una gran tarta de cinco pisos con una gran ‘P’ en la parte superior, y sopló las velas mientras sus invitados entonaban Las mañanitas.
Para esta inolvidable cita, la cantante llevó un minivestido azul metalizado de su amigo el diseñador estadounidense Michael Costello, con el que lució su envidiable figura.
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© ©La noche fue larga y, al reflexionar sobre cómo se siente al cumplir medio siglo de vida, Paulina nos habló de la importancia que tiene para ella la familia, de los sueños e ilusiones que le quedan por alcanzar y de sus planes de seguir triunfando, porque “la chica dorada” suma y sigue con más energía que nunca.
—¿Qué fue lo que más disfrutaste de tu fiesta de cumpleaños?
—Ver bailar a mis hijos con mi madre. Disfrutar con mis amigos, que hace más de un año no veía, y por fin poder abrazar a la gente que más quiero. Estuvieron mi madre, mi hermano, mis hijos y mis amigos de toda la vida.
“A la Paulina de hace veinticinco años le diría que todos sus sueños se van a hacer realidad. Que esté tranquila y que pise fuerte”, confiesa la cantante
—¿Cómo te sientes al cumplir medio siglo de vida?
—Me siento afortunada, plena y tengo la inspiración de mis dos niños. Cada día con ellos es acción y una aventura. Estoy lista para los próximos cincuenta.
—Con la sabiduría adquirida con el paso de los años, ¿qué consejo le darías a la Paulina más joven, la de hace veinticinco años?
—Que todos sus sueños se van a hacer realidad. Que esté tranquila y que pise fuerte.
© ©—Tras un año de pandemia y tremendos desafíos, ahora te tocó, por fin, celebrar, ¿qué es por lo que más agradecida te sientes en este momento de tu vida?
—Estoy agradecida por ver a mis hijos y a mi madre con salud y por tener un público y unos amigos que me aman tanto como los amo yo. Me siento muy bendecida.
—¿Nos podrías detallar cuáles son las metas o deseos que aún te faltan por cumplir?
— Estoy muy emocionada con el lanzamiento de mi nuevo single y voy a filmar un documental que dirigiré. Me apasionan la música y el cine. Estoy realizando colaboraciones que siempre cambian mi ADN musical. Y no puedo esperar más para estar en directo con mi público, volviendo a los escenarios.
—Si la vida de Paulina fuera una película, con todo lo vivido, ¿qué género sería y qué título llevaría?
—Definitivamente, sería un musical familiar y se llamaría Y yo sigo aquí.
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