El presidente de Estados Unidos Joe Biden mantuvo un encuentro privado con la reina Isabel II de Inglaterra en Windsor. El líder estadounidense y la primera dama Jill Biden aterrizaron en la residencia real de Berkshire justo después de asistir a la cumbre del G7 en Cornualles para tomar un té con la Reina en el castillo de Windsor. Si algo ha destacado Biden de este distendido encuentro con Su Majestad es la generosidad y la amabilidad de la soberana y lo mucho que le ha recordado a su difunta madre.
"No creo que se sienta ofendida, pero me recordó a mi madre, su mirada y su generosidad". "Tuvimos una larga charla", añadió Biden, "y ella fue muy generosa". Catherine Biden, la madre del presidente, a quien la familia llamaba Jean, murió en 2010 a la edad de 92 años. Ella solía acompañar a su hijo en los dicursos y no tenía inconveniente en mostrar en público el afecto y el orgullo que sentía por su hijo al final de cada mitin, como cuando el presidente electo Barack Obama ganó las elecciones en Chicago en 2008 y Biden era vicepresidente electo. Joe estaba muy unido a su madre y fue una persona muy influyente para él. Cuando falleció la primera esposa de Joe Biden y su hija en una accidente automovilístico, Jean, que era una católica devota, se aferró a su fé: "Joey, Dios no envía ninguna cruz que no puedas soportar'". A todos sus hijos les inculcó los valores del honor y de la lealtad y no permitió injusticias con ninguno de ellos.
El recibimiento de Isabel II a Joe Biden consistió en un desfile militar de los guardias de palacio en el patio del Castillo de Windsor, en lugar del centro de Londres, debido a la pandemia y que se ha convertido en su residencia phabitual desde el inicio de la crisis sanitaria. Vestida con un colorido traje floral y un sombrero rosa a juego, la soberana, de 95 años, recibió al presidente con toda la pompa y boato a pesar de las restricciones por el coronavirus. El presidente y la primera dama fueron recibidos en el patio central de este histórico castillo que data del siglo XI por la Guardia de Honor, formada por el primer batallón de guardias granaderos de la Compañía de la Reina. Al finalizar, los tres han disfrutado de un té en el interior de esta fortaleza donde pudieron conversar de manera distendida.
Durante su encuentro Biden reveló que la reina le preguntó sobre algunos mandatarios políticos, como los líderes de Rusia y China, Vladimir Putin y Xi Jinping, y también le preguntó cómo era la vida en la Casa Blanca. Biden aseguró que invitó a Isabel II a visitar la residencia oficial del presidente de Estados Unidos en Washington. La última visita de un presidente de Estados Unidos a Reino Unido había sido la de Donald Trump.
El pasado 10 de junio, pocas horas después de aterrizar en Reino Unido para asistir a la cumbre del G7, Joe Biden, que comenzaba su primer viaje internacional desde que asumiera su mandato en enero, quiso homenajear al duque de Edimburgo el día que hubiese celebrado sus cien años. "Quiero expresar nuestras condolencias, en nombre de Jill y mío, a su majestad la reina Isabel II, a toda la Familia Real y al pueblo del Reino Unido. Hoy habría sido el centenario del príncipe Felipe".
Isabel II ha ido recuperando las tradiciones desde el fallecimiento de su marido, el duque de Edimburgo. El pasado sábado presidió el tradicional Trooping the Colour, un desfile militar que la monarca suele presidir normalmente desde el balcón del palacio de Buckingham, pero que debido a la pandemia y al igual que sucedió el año pasado se celebró en el castillo de Windsor. Fue la primera celebración de este desfile tras la muerte del duque de Edimburgo, el esposo de la reina, y en su lugar le acompañó el duque de Kent, primo de la soberana. No es la primera vez que el Duque, Coronel de la Guardia Escocesa, ocupa este importante lugar sino que en 2013 ya la acompañó en el desfile porque Felipe de Edimburgo estaba recuperándose de una operación
--Isabel II se despoja del luto en su primer acto oficial tras el funeral de su marido