Tres semanas después de anunciar públicamente su divorcio, Bill Gates ha sido fotografiado en público. Luciendo una barba ‘de tres días’ que ocultaba bajo la mascarilla, el cofundador de Microsoft sorprendía luciendo aún su anillo de boda, algo que daría a entender que al menos el vínculo con su exmujer, Melinda, con la que estuvo casado durante 27 años, no se ha esfumado de la noche a la mañana.
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Vestido con un polo gris, pantalones azul marino y un informal suéter atado a la cintura, Bill fue visto saliendo del hotel Greenwich en la ciudad de Nueva York acompañada de su hija Phoebe, de 18 años, y su novio Chaz Flynn, con los que compartió un almuerzo en Nobu 57, uno de los restaurantes de moda de la Gran Manzana.
Una vez dada por concluida la cita y tras haber pasado todo el fin de semana allí, Gates y sus acompañantes abandonaron la ciudad a bordo de un exclusivo helicóptero con capacidad para un máximo de 13 personas, incluidos los dos pilotos, y que se puede alquilar por 4.350 euros la hora.
© GtresonlineDesde que se conoció la noticia de su separación, Gates se ha visto sacudido por numerosos rumores de infidelidad, así como por su polémica amistad con el fallecido Jeffrey Epstein. Hace tan solo unos días un portavoz del propio empresario confirmaba que Gates había mantenido una relación extramatrimonial, que habría tenido lugar hace veinte años y que terminó de manera amistosa, sin embargo, y según afirman los medios estadounidenses esta no habría sido la única.
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Intentando en estos momentos mantener un perfil bajo y seleccionar mucho sus apariciones públicas unos informes publicado por Daily Beast y el New York Times afirmando que Gates y Epstein se reunieron en numerosas ocasiones entre 2011 y 2014, hacian salir al magnate de su aparente “letargo” para, a través de uno de sus representantes, calificar dichos informes de "inexactos" y desmentir que él hubiera calificado su matrimonio con Melinda de "toxico".
"Cualquier afirmación de que Gates habló de su matrimonio o de Melinda de manera despectiva es falsa", dijo el portavoz del magnate. "Bill nunca recibió ni solicitó consejo personal de ningún tipo de Epstein, sobre su matrimonio o cualquier otra cosa. Bill nunca se quejó de Melinda o de su matrimonio con Epstein".
"Los rumores y las especulaciones en torno al divorcio de Gates se están volviendo cada vez más absurdos y es lamentable que las personas que tienen poco o ningún conocimiento de la situación sean caracterizadas como 'fuentes'" acababa diciendo la nota.
Por su parte, Melinda de momento no se ha dejado ver públicamente, ni ha hecho ningún tipo de declaraciones y se encuentra refugiada en la isla privada de Calivigny Island, en Granada, una de las Antillas Menores del Caribe, arropada en todo momento por sus seres queridos.
