A diferencia de otros multimillonarios, Jeff Bezos ha solido apostar por un perfil bajo alejado de todo tipo de ostentaciones. Una facetasimilar a la que podemos encontrar en Amancio Ortega, con quien el hombre más rico del mundo parece compartir la afición por la náutica. Un hobby tan caro como exclusivo. Prueba de ello es el megayate que el creador de Amazon ha encargado que le construyan y que, según un libro editado por Bloomberg, le costará cuatrocientos once millones de euros y se posicionará como el segundo velero más grande del mundo en su clase.
Aunque el proyecto se está fraguando en secreto, ya ha trascendido que la embarcación tendrá ciento veintisiete metros de eslora (será más grande que un campo de fútbol), dispondrá de tres mástiles de grandes dimensiones y contará con un yate de apoyo con helipuerto, algo que tiene sentido, dado que Lauren Sánchez, pareja de Bezos, es piloto de helicópteros.