Si de algo puede presumir Sara Carbonero es de tener grandes amigas. Tras su divorcio de Iker Casillas, la periodista ha encontrado la calma en Isabel Jiménez o Raquel Perera, pero también en la peluquera y maquilladora Vicky Marcos, a quien conoce desde hace muchísimos años. Con esta última ha disfrutado de una tarde en el cielo de Madrid, entre confidencias, una sesión improvisada de fotos y una de las bebidas más refrescantes de Italia, el spritz. "Te echaba de menos", publicó Sara en una foto en la que aparece con Vicky. "Y yo a ti. Qué buen ratito hemos pasado juntas", añadió la peluquera y estilista. La periodista, que acaba de llegar de Cádiz, lució un bonito bronceado con un top negro de pronunciado escote en la espalda que combinó con un vaquero y unas originales alpargatas. Además de la mascarilla obligatoria, que se la quitó para la improvisada sesión de fotos, llevaba joyas de su nueva colecció y unas favorecedoras gafas de sol.
Aunque nació en Corral de Almaguer (Toledo) y disfrutó de unos años maravillosos en Oporto, la periodista adora Madrid y los cientos de planes que ofrece la ciudad. "Madrid es una excusa para contar historias", ha dicho, una frase de Francisco Umbral que le viene como anillo al dedo para la nueva etapa que está viviendo. Sara se encuentra en plena tormenta mediática, pero ha sabido encontrar la calma en sus mejores amigas. Además, se ha volcado en sus numerosos compromisos profesionales y tiene ante sí un futuro lleno de ilusiones con su trabajo en Radio Marca y en Slow Love.
Sara ha vuelto a casa tras escaparse a Cádiz con Raquel Perera. Ambas son amigas desde hace años y atraviesan situaciones personales muy parecidas. No hay que olvidar que la periodista se separó de Iker Casillas en marzo, mientras que el matrimonio de la psicóloga con Alejandro Sanz se rompió en julio de 2019. Hace unas semanas, también fueron juntas al concierto que Vanesa Martín ofreció en Madrid porque, según dijo Sara tras la actuación de la cantante malagueña, "tenemos que ser cautos, pero tenemos que vivir y tenemos que arañar esa normalidad que perdimos hace ya un año y dos meses" por la pandemia.
Una montaña rusa de sentimientos
Estos últimos meses han sido especialmente intensos para Sara Carbonero, de 37 años. A principios de febrero tuvo que pasar de nuevo por el quirófano y el 12 de marzo confirmó su separación de Iker Casillas, tras 11 años de relación, casi cinco de casados y dos niños en común, Martín, de siete años, y Lucas, de cuatro. Unas semanas más tarde, según Diez Minutos, la expareja acudió al Juzgado de Pozuelo de Alarcón (Madrid) para firmar su divorcio. Una decisión tomada de manera amistosa que habría facilitado el convenio al que llegaron. Sara mantiene la custodia de Martín y Lucas, pero otorgando un régimen de visitas muy flexible para Iker, porque lo más importante para ambos es el bienestar de sus hijos. "Nuestro amor de pareja toma caminos distintos, pero no lejanos puesto que continuaremos juntos en la maravillosa tarea de seguir siendo padres dedicados, como hasta ahora lo hemos hecho", dijeron al confirmar su ruptura. "Nuestra prioridad es, desde el cariño y el compromiso, compartir el bienestar y la educación de nuestros hijos y protegerlos para que crezcan en un entorno estable y saludable", aseguraron.
Estas son las tres 'supermujeres' en las que Sara Carbonero se refugia