Aunque la relación entre Rocío Carrasco y su hija se rompió definitivamente el 27 de julio de 2012, ambas guardan numerosos recuerdos de esos quince primeros años de vida de Rocío Flores. Así nos lo contó la nieta de Rocío Jurado después de haberse hecho un nombre propio en televisión gracias a su participación en Supervivientes. Entonces, no sólo nos daba su versión sobre la agresión a su madre, sino que nos aseguraba que nada de eso hubiera ocurrido si su abuela cantante siguiera con vida, que no hay que olvidar que Rocío Jurado falleció a causa de un cáncer en junio de 2006, cuando su nieta tenía sólo nueve años. Así lo contaba a ¡HOLA! Rocío Flores.
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—¿Has tenido una infancia feliz?
—He sido muy feliz. Recuerdo muchos otros momentos con mi abuelo Pedro en su casa: me sentaba en sus rodillas, me sacaba bombones de chocolate blanco de las orejas y me tiraba al suelo a jugar con él, rodeada de sus trofeos de boxeo. Pero pude disfrutar más de mi abuela. Siempre estaré agradecida a mis abuelos por todo el amor que nos han dado. Los llevo en el corazón.
—¿Cuál es el recuerdo más bonito que tienes de tu madre?
—Los recuerdos más bonitos son de toda la familia reunida en Navidad, en casa de mi abuela. Ahí éramos muy felices.
—¿No tienes ninguno más concreto de tu madre?
—Los que te he dicho.
—¿Y de Gloria Camila y José Fernando, de pequeños?
—Siempre hemos estado muy unidos. Los considero mis hermanos.
“Si mi abuela estuviera, no hubiera pasado nada. Estoy segura”
—¿Cómo recuerdas a tu abuela Rocío Jurado?
—Alegre, cariñosa y feliz. Me acuerdo cuando me cantaba o cuando dormíamos la siesta todos juntos, viendo películas antiguas, como Ben Hur o de la época de Cristo, que a ella le encantaban. Como se fue cuando yo tenía nueve años, tengo muchos recuerdos. Además, yo era su ojito derecho, eso lo tengo claro (ríe). Era una abuela diez y es un pilar fundamental en mi vida.
—¿Sueles ver vídeos de ella?
—Sí, pero tardé mucho, mucho en hacerlo y en escuchar canciones suyas... No podía. Ahora estoy muy orgullosa.
—¿Qué admiras de ella?
—Su fortaleza.
—¿Por todo lo que sucedió con su salud?
—Sí. Pero no fui consciente y lo agradeceré siempre, porque me quedo con la parte buena de ella.
—¿Qué has heredado de tu abuela?
—La voz seguro que no (ríe). Y el parecido creo que tampoco, aunque me han dicho que me parezco a mi tía Gloria y que tengo un aire a los Mohedano.
—¿Guardas algo de tu abuela?
—Sólo la lata que me llevé a Supervivientes. Pero es más importante el recuerdo que lo material.
—Con José Ortega Cano mantienes una excelente relación.
—Es una de las personas que me ha criado. Para mí, es como mi abuelo. Es una persona muy importante en mi vida.
—¿Qué pensaría tu abuela de la situación familiar?
—Imagino que le daría pena. Lo he pensado muchas veces. Si mi abuela estuviera, no hubiera pasado nada. Estoy segura.
—¿Qué ha supuesto para ti formar parte de una familia tan conocida?
—Estar en boca de mucha gente, tener que escuchar críticas y opiniones de personas que lo hacen sin conocerme. Pero también recibo muchísimo cariño y apoyo, que es con lo que me quedo. Si volviese a nacer, pediría que me tocase mi misma familia porque es un orgullo.