El pasado jueves 7 de mayo Marta López se convertía en segunda eliminada oficial de Supervivientes. Era su primera nominación y, tras el televoto frente a Palito Dominguín y Lola, exconcursante de La isla de las tentaciones, la audiencia decidía que fuera quien volviera a España. "Me da mucha pena porque tenía mucha ilusión, pero bueno parece ser que no caigo bien y no gusto y lo tengo que asumir. Es lo que hay", relataba a Jorge Javier al enterarse de la expulsión. Aunque muchos de sus compañeros de cadena alababan su paso por el concurso porque la ex gran hermana había dado muchos buenos momentos, otros criticaban su amistad con Olga Moreno y creían que la decisión del público era el castigo por haberse acercado a ella. "Te he defendido como concursante, pero es imperdonable que cuando hablabas con ella le adjudicabas a los hijos de Rocío Carrasco, de quien decías que era la madre biológica y que había abandonado a sus niños", decía Belén Rodríguez a Marta, quien no dudaba en defenderse.
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"En ningún momento he juzgado a Rocío Carrasco como madre. Hay cosas que no entiendo porque yo he visto varios capítulos de Rocío, contar la verdad para seguir viva antes de venir y hay cosas que ni entiendo ni voy a entender. A mí Olga no me ha estrujado el cerebro, a mí lo único que me ha dado ella es cariño y solamente por cómo habla de esos niños se merece todo el respeto del mundo. Lo siento porque sé que Rocío Carrasco es tu amiga y respeto tu posición, pero no la comparto", explicaba Marta a Belén. Pero la colaboradora no estaba de acuerdo con la respuesta de la superviviente y le intentaba hacer entender que no había visto todos los documentos e informaciones aportadas por la hija de Rocío Jurado: "Cuando vuelvas a España verás cuál es la realidad, pero sí, tú has adjudiado los hijos de Rocío a Olga".
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"No, no, no. Mira Belén, tú puedes afear mi concurso y me parece fenomenal porque acepto todas las críticas pero os falta parte porque Olga siempre ha dicho que quiere a esos niños con locura, pero que tienen a su madre. Que ella no lo es, pero que los ha querido y los quiere como una madre. En varias ocasiones ha puntualizado que esos niños tienen a su madre y que ella no lo es", continuaba Marta. Pero además la colaboradora de Ya es mediodía expresaba lo que sentía al haber sido la segunda expulsada del programa, casi igual que la vez que concursó en Gran Hermano, donde fue la primera eliminada. "Casi la primera otra vez. Me da mucha pena y rabia y lo llevo fatal. Siempre tengo la sensación de que no hago las cosas bien y que hay algo que no transmito al público y que no me aceptan. Como dice Kiko Matamoros sé algo de televisión, pero creo que al arriesgarme y no callarme, sonbre todo con Melyssa, he perdido", concluía la leonesa.