Sofía Palazuelo y Fernando Fitz-James Stuart ya están instalados en su nuevo y fabuloso ático en el centro de Madrid, a muy pocos metros del Palacio de Liria. Los duques de Huéscar están encantados con su nuevo hogar, un luminoso y amplio piso con vistas privilegiadas a los jardines del palacio del duque de Alba. La pareja está dando los últimos toques a la decoración y estos días ha salido de compras por las calles del barrio de Argüelles.
La duquesa y el duque han comprado algunos objetos decorativos y utensilios para el hogar en una conocida tienda. Sofía y Fernando comenzaron a reformar el piso el pasado otoño, poco después de la llegada de su primera hija, Rosario, que ya tiene ocho meses de vida. La pareja se instaló en el ático al poco tiempo de casarse y, tras convertirse en padres, decidieron remodelarlo y han estado viviendo en el Palacio de Liria hasta que las obras finalizaron.
© MADPHOTOSofía ha contado con el apoyo de su madre, Sofía Barroso, en las tareas de decoración de su casa. La madre de la duquesa es una experta en el mundo del arte y el interiorismo y es la fundadora de Around Art, una empresa que proporciona experiencias únicas y exclusivas introduciendo a sus clientes en casas históricas y particulares, colecciones privadas de arte, estudios de artistas y museos a puerta cerrada. Madre e hija trabajan juntas y están en contacto con expertos y personalidades relacionadas con el arte y la cultura de España y el resto de Europa.
Pronto, los duques de Huéscar tendrán nuevos vecinos en su edificio. Carlos Fitz-James, hermano menor de Fernando, y su futura mujer, Belén Corsini, también vivirán en la finca palaciega a metros de Liria. La pareja se casará el 22 de mayo en los jardines del palacio madrileño de los Alba y, tras dar el ‘sí, quiero’, se instalarán definitivamente en su nuevo hogar. Con Sofía y Belén como vecinas, las calles de la zona de Conde Duque prometen convertirse en un desfile de elegancia.
© MADPHOTOAntiguamente, el solar donde se levanta el edificio en el que viven los duques de Huéscar y los futuros condes de Osorno formaba parte de los dominios del Palacio de Liria. De hecho, algunas fincas del barrio se segregaron del terreno del histórico hogar de los Alba. En la actualidad, Carlos Fitz-James, duque de Alba, sigue siendo el dueño de algunos edificios que colindan con el palacio y sus fabulosos jardines.
