Las "denuncias cruzadas" que surgen entre Rocío Carrasco, Antonio David Flores y Rocío Flores después de la agresión de la hija a la madre, que tuvo lugar el 27 de julio de 2012, son las que han ocupado este noveno episodio de la serie documental. En el mismo, la hija de Rocío Jurado ha explicado las lesiones que sufrió, y por las que tuvo que acudir al hospital, y no ha podido evitar las lágrimas al asegurar que ella cree que Rocío Flores no se arrepiente de lo sucedido. El relato ha comenzado precisamente en el día del incidente, ya que la protagonista ha comentado que su hija tenía el móvil abierto mientras le pegaba, con alguien supuestamente al otro lado de la línea, y asegura que la menor gritaba "no me pegues" mientras daba los golpes.
- Rocío Carrasco revela el episodio que rompió la relación con su hija
Mientras Rocío Carrasco se recuperaba en su casa, su hija se había montado en el coche que tendría que llevarla a los cursos extraescolares a los que estaba acudiendo, pero en cambio Antonio David, a través del teléfono de Rocío Flores le dice al conductor que lleve a la joven al cuartel de la Guardia Civil. Sin embargo este se niega y la lleva al colegio. En el trayecto recibe la llamada de la hija de 'La más grande' diciéndole que necesita ir al hospital. "Yo tenía moratones por muchas partes, un ataque de pánico y las pulsaciones no me bajaban, pero Fidel no me podía llevar porque yo no quería que mi enano (en referencia a su hijo David) me viese en esa situación", ha contado la protagonista de la serie documental.
Durante la espera para ir al centro sanitario, Rocío habla con el colegio para organizar qué pasaría con su hija entonces. El director había hablado con Antonio David, que estaba en Málaga y le había dicho que sería un amigo suyo quien recogería a la niña cuando se acabara las clases. "La niña no puede volver a mi casa", comenta entre lágrimas la hija de Pedro Carrasco. "En el hospital entro pidiendo por favor que no se fuera a saber nada de lo que allí pasara, que yo no quería que nada saliera de allí. Entonces el médico me dice que lo siente mucho pero que él tiene que dar parte y que me tengo que quedar porque tengo un traumatismo", ha contado la protagonista, entre lágrimas y visiblemente alterada.
- La versión de Rocío Flores sobre la agresión a su madre
Rocío ha asegurado también que su hija no se siente responsable por lo ocurrido en este incidente, tal y como ya había dado a entender Antonio David en sus apariciones televisivas de los últimos años. "De que no tenga nada que arrepentirse y que no se sienta culpable es responsabilidad de ese que está ahí", ha comentado, haciendo referencia a su "Ro", como llaman a la niña cariñosamente en su casa, y al ex guardia civil. "Es una muestra más del daño que es capaz de infligir en los demás. Yo creo que no se arrepiente. Yo tristemente creo que no se arrepiente", ha sentenciado.
Finalmente, Rocío Flores es considerada culpable de haber "atentado contra la paz familiar en el domicilio en el que convivía con su progenitora" por haber llevado a cabo "diversas acciones que han creado un ambiente de tensión". Se detalla en el auto una serie de insultos y acusaciones, y la madre recuerda también un incidente con un cuchillo que se ha mencionado de pasada en dos ocasiones y que dice que defendió como un accidente ante el juez. La joven es condenada entonces a sesenta horas en beneficio a la comunidad, pero tanto la niña como su padre se niegan a que las cumpla, así que se le conmuta la pena por seis meses de libertad vigilada. "Por eso se queda en Madrid, porque si no se hubiera ido a Málaga", ha contado la hija de Pedro Carrasco.
Los antecedentes
Tal y como ha contado en episodios anteriores, Rocío Flores estaba en su casa durante el verano, acudiendo a un curso para recuperar asignaturas que había suspendido, pero agosto lo pasaría con su padre. Previamente Antonio David Flores había puesto una demanda para cambiar las condiciones de la custodia y que la hija mayor de la expareja pasara a vivir con la familia de su padre, pero el juez no lo había otorgado en primera instancia. En cambio pidió que se hiciera un informe psicosocial con la intención de comprobar las alegaciones de la menor, que aseguraba que su madre la maltrataba.
- Rocío Carrasco: 'Me duele que mi hija sea capaz de querer ver a su madre en la cárcel'
El último día que se vieron fue el 27 de julio, cuando Rocío hija salió del hogar familiar después de haber agredido a su madre, que terminó en el hospital. Nunca más volvieron a verse, según ha contado Rocío Carrasco en el documental, pese a que continuaron después en una batalla legal que se explora en este episodio. Además, la protagonista ha asegurado que sigue queriendo a sus hijos pese a todas las dificultades: "A mí esa condena que ella tiene no me reporta ningún beneficio, solo sufrimiento". "A mí no me devuelve nadie un beso de mi hija", ha insistido la protagonista. "Nadie ha hecho nada", ha dicho entre llantos.