La familia de Lydia Bosch está de celebración, ya que sus mellizos Ana y Juan, nacidos durante su matrimonio con el arquitecto Alberto Martín, acaban de cumplir dieciocho años. En estos momentos, los hermanos se encuentran preparándose para los exámenes de Selectividad, tras finalizar su Bachillerato con éxito. Ambos lo estudiaron en un centro escolar inglés, que es el mismo al que acuden los hijos de Sara Carbonero e Iker Casillas o en el que también se formaron Tana Rivera, Luis y Amina Martínez de Irujo y los hijos de Mariano Rajoy, entre otros.
Todavía es pronto para saber qué camino tomarán los mellizos en la universidad. ¿Se decantarán por las Ciencias Sociales, que es la carrera que hizo Lydia Bosch antes de triunfar como actriz? ¿Quizá alguno apostará por la Arquitectura, como su padre? De lo que no hay duda es que ambos han heredado el talento artístico de su madre, como su hermana mayor, Andrea Molina, la hija que Lydia tuvo con el también actor Micky Molina.
Tanto Ana, que se parece mucho físicamente a su madre, como Juan disponen de un don especial para la comunicación. Así lo manifiestan en las redes y, concretamente, en TikTok, donde ella demuestra sus dotes para el baile y él triunfa con sus pequeños sketches de humor. Gracias a sus ingeniosos vídeos, Juan cuenta ya con más de ciento sesenta mil seguidores procedentes de todo el mundo: México, Argentina, Colombia, Perú y, por supuesto, nuestro país.
Pero si hay algo que distingue a los mellizos es su carácter familiar. Ambos sienten adoración por su madre, su hermana Andrea y también por su abuela materna, Lydia de Buen Marcè, que trabajó como enfermera antes de jubilarse y que ha pasado la pandemia en Somosaguas, urbanización situada en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, que es donde la popular actriz tiene fijado su domicilio familiar. “Sois lo más importante de mi vida con mami y la ‘avia’ –como llaman a la abuela en casa–. Me siento tremendamente orgullosa del equipo que formamos, de la familia que somos, de la unión que tenemos, de nuestra complicidad, de la confianza que tenemos para contarnos todo”, confiesa Andrea Molina a sus seguidores.
Precisamente es la hija mayor de Lydia Bosch quien define el carácter de sus hermanos pequeños. Sobre su hermana Ana, confesó hace un tiempo: “Admiro tu fuerza, tu espontaneidad, tu capacidad de reírte de ti misma y de saber hacernos reír a los que estamos a tu lado siempre, hasta cuando estamos tristes. La forma en la que nos entendemos con solo mirarnos sin tener que decir ni una sola palabra”.
Por su parte, Andrea apuntó sobre la personalidad de Juan: “Admiro tu gran sensibilidad, la forma en la que nos cuidas, nos proteges y nos quieres. A las tres, a tus chicas. Te estás convirtiendo en un hombre maravilloso, lleno de sensibilidad y de carisma, del cual estamos tremendamente orgullosas mamá y yo”. Y es que los tres hijos de Lydia Bosch se llevan estupendamente bien. “Ellos me hacen ser una superhermana. Tengo a los mejores hermanos del mundo. Buenos, sensibles y con un corazón inmenso”, manifestó Andrea, antes de añadir: “Somos los tres mosquetero: Todos para una y uno para todos”.