Ana Boyer tuvo, el pasado domingo, un cumpleaños muy dulce. Sobre todo, por la cantidad de tartas que recibió en casa de su madre, Isabel Preysler, donde se encuentra actualmente junto a su marido, Fernando Verdasco, y sus dos hijos, Miguel y el pequeño Mateo, nacido en diciembre pasado. La más pequeña de las Preysler cumplía treinta y dos años y la casa se llenó de obsequios, ramos de rosas y, como decíamos, de tartas. Incluso el novio de Tamara, Íñigo Onieva, envió dos a su “cuñada”, una de chocolate y otra de queso, tal y como compartió Verdasco en sus redes sociales.
El tenista no dejó pasar la oportunidad de felicitar a su mujer en persona y con cariñosos mensajes, al igual que sus hermanos, que publicaron imágenes junto a Ana en diferentes etapas de su vida. Además de celebrarlo en familia, la hija de Isabel Preysler salió también a cenar con su marido y sus amigos más cercanos a un restaurante madrileño.
Ana y Fernando han formado una familia de trotamundos y en breve volverán a partir, aunque esta vez no por mucho tiempo, ya que el tenista tiene previsto participar en el Open de Tenis de la capital, que se celebra del 30 de abril al 9 de mayo.